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En el acto alternaron lecturas de poemas de amor a cargo de los miembros de la asociación y autores relevantes con las interpretaciones del Grupo Vocal Lyrica
“Quien lo probó lo sabe”. Con este título tan elocuente, la Asociación Cultural Artefacto de Rute vuelve a organizar cinco años después un recital de poesía amorosa, con motivo de la celebración del día de San Valentín. La cita está extraída de un soneto de Lope de Vega y alude a los múltiples efectos, sentimientos, alegrías, sufrimientos o desilusiones que provoca el amor. El acto al que daba nombre se celebró el último sábado de febrero en el auditorio del CEMAC “Pintor Pedro Roldán”.
El encargado de presentarlo fue el presidente de Artefacto, Antonio José Gómez, y durante su desarrollo se fueron alternando las reflexiones y lecturas poéticas de autores destacados, que corrieron a cargo de diferentes miembros de Artefacto, y las interpretaciones musicales del Grupo Vocal Lyrica. Esta formación está compuesta por la soprano ruteña Verónica Molina y sus compañeros el tenor Luis David Barrios, la otra soprano, Soledad Ruiz, y Antonio José Henares, al piano.
- Según dijo Isabel Ramos, la poesía es un compromiso con la palabra y de lucha contra la inequidad o la crueldad
Sobre qué es el amor se preguntaban Ana Burguillos e Isabel Delgado. Ambas se interpelaban con distintas respuestas o definiciones que se completaban con las lecturas poéticas de otros miembros de Artefacto. Eran textos de a autores como Jorge Marinque o Francisco de Quevedo. Al primer amor, lo que provoca y los recuerdos y las huellas que deja en nuestra memoria, se refirió Mercedes García. En este caso, se alternaron las lecturas de Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado o Gabriela Mistral, con la adolescencia, los primeros besos y deseos como telón de fondo.
Entre las lecturas de esta noche no faltaron las decepciones amorosas. Según dijo Aquilina Navarro, “por cada lágrima derramada encontramos la semilla de nuestra fortaleza”. Aquilina Navarro habló del amor y de sus luces y sombras. Le siguieron sus compañeros y compañeras de Artefacto, con las lecturas de autores como Pedro Salinas, Gustavo Adolfo Bécquer o Dulce María Loynaz, entre otros.
Por supuesto, tampoco faltaron las alusiones al “amor pleno”, a ese sentimiento que nos ayuda a crecer, en palabras de Ana Burguillos. Según dijo, puede resultar fácil encontrar el amor. Sin embargo, para que sea profundo y sólido ha de ganarse. De la pérdida del amor habló Isabel Delgado. Se refirió a un amor que se produce por desencanto o desilusión o lo que es peor, porque pierde la vida la persona amada. Es, dijo, un amor que provoca vacío, desorden, caos, dolor. De nuevo, esas reflexiones sobre la plenitud o la pérdida de un amor, estuvieron acompañadas de las lecturas, entre otros, de Miguel Hernández o Rafael Alberti, en el primer caso; o de Antonio Gala, Antonio Machado y Garcilaso de Vega, en el segundo.
Finalmente, Isabel Ramos se centró en “el amor eterno”, ése que ha de llegar tras el respeto mutuo, la complicidad o la sinceridad. Para Ramos, la poesía es un compromiso con la palabra. Según dijo esta nos ayuda a protegernos de “la crueldad, las inequidades y de un mundo ensangrentado”. Junto a estas lecturas, destacaron los aplausos y los “bravos” que recibió el Grupo Vocal Lyrica, que fue el encargado a lo largo de todo el recital de cerrar cada parte. En esos tramos, interpretaron piezas de autores tan relevantes como Mozart, Rossini o Barbieri. También recrearon fragmentos de obras tan famosas como “La verbena de la Paloma”, con el célebre “¿Dónde vas con mantón de manila?”, de Tomás Bretón.
