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El mes ha terminado con 447 desempleados, nueve más que en febrero, de los que todos son hombres, mientras que hay una mujer parada menos
El último informe del Observatorio Argos ha supuesto un doble revés en la creación de empleo en Rute. Según el parte que elabora mensualmente para la Junta de Andalucía, marzo ha finalizado con 447 parados en el municipio. Por un lado, son nueve más que en los 438 que había al término de febrero. Además, se invierte la tendencia que se ha dado en Andalucía y el resto de España. El repunte es notorio, hasta el punto de que es la peor cifra desde noviembre pasado. Entonces, en plena campaña de Navidad, el número de inscritos en la Oficina de Empleo era de 449.
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Terminado ese trimestre final de cada ejercicio tan fructífero en Rute, otro periodo favorable en los últimos años es la Semana Santa. Coincidiendo con el buen tiempo y el interés por ver las procesiones en la calle, cada vez es más habitual que las plazas de alojamiento se copen, al menos en los días centrales. Ello repercute igualmente en la hostelería. Sin embargo, la lluvia, vital para paliar la situación de sequía, ha frenado al mismo tiempo esa dinámica turística. También el balance interanual empeora. Al término de marzo de 2023 había 441 parados, ocho menos que ahora.
Una de las pocas lecturas favorables del último informe está en la brecha de género, que sigue reduciéndose. De hecho, el paro ha aumentado de nuevo sólo en los hombres. En febrero, había 178 inscritos en la Oficina de Empleo, diez menos que los 188 con que ha cerrado marzo. En cambio, de las 260 paradas que había hace un mes, según los datos de Argos, una ha encontrado trabajo, dejando la cifra en 259. Aun así, esa brecha sigue siendo amplia, con 71 mujeres desempleadas más que hombres.
La subida de Rute no es nueva. Argos elabora estos informes para la Junta desde 2005. En esa década las variaciones entre febrero y marzo aún eran mínimas. Desde 2010, en cambio, lo habitual es que el paro aumente en estas fechas de forma notable. De hecho, la subida actual ha sido de las más suaves. El caso más acentuado fue el año 2020, cuando irrumpió la pandemia. En un solo mes el desempleo se elevó de 522 a 724 personas, pero fue en un contexto marcado por la doble crisis sanitaria y económica. En la anterior crisis económica, en la primera mitad de la pasada década, hubo dos periodos en que de febrero a marzo se bordeó o se superó el centenar de nuevos parados. En 2012, se pasó de 543 a 675, y en 2016 de 552 a 646. Por el contrario, curiosamente, la última vez en que bajó respecto a febrero fue en 2023, de 451 a 441.
