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IU y PSOE critican que los proyectos ejecutados por los populares se habían fraguado en el anterior mandato y éstos reprochan al antiguo equipo la deuda del Ayuntamiento
Balance de la política local en 2023
Cada vez que acaba un año, es habitual hacer balance de los doce meses anteriores en multitud de ámbitos y aspectos. En el plano político, un contenido habitual del programa especial de fin de año de Radio Rute es la valoración de los portavoces de los partidos con representación en el Ayuntamiento. En el caso del recién concluido 2023, lo hicieron en dicho especial la edil de Izquierda Unida, Ana Lazo, el socialista Antonio Ruiz y en las filas del PP el alcalde David Ruiz. A diferencia de otros ejercicios, coinciden en que en esta ocasión hay que distinguir entre antes y después de las elecciones municipales. Hasta entonces, había un cogobierno de IU y PSOE, que pasarían a la oposición tras lograr la mayoría absoluta de los populares el 28 de mayo.
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Siguiendo el orden actual de representatividad en el Consistorio, Lazo ha subrayado que quien gobierna planifica la gestión a largo plazo. Así, asegura que buena parte de los proyectos canalizados después de constituirse la nueva Corporación en junio “se habían gestado” en el anterior mandato. Por eso, resume que los populares en estos meses se han limitado a “coger riendas, tomar contacto y finalizar proyectos que ya estaban preparados”. Aparte de eso, cree que no han ido más allá de recurrir al “lloro” y culpar al anterior equipo de una mala gestión.
La concejala de IU desmiente este extremo, y se basa en los remanentes positivos de Tesorería que han dejado en las arcas municipales. Además, cree que los mandatos de cogobierno “han mejorado la calidad de vida” de la gente de Rute. Ahora, en cambio, confiesa que le “apena” que se haya perdido medio millón de euros de subvención para el arreglo de la ronda y que los nuevos presupuestos municipales carezcan de inversiones. Entiende que, más allá de subirse los sueldos, hay que saber tocar a todas las puertas para conseguir fondos. Por lo demás, admite que la relación con los gobernantes es “fluida”, pero sin mucho contacto, y en los plenos se torna “tensa”.
Por su parte, Antonio Ruiz ha insistido en la subida de sueldos de los populares y que a la vez digan que no hay dinero “para nada”. Al igual que Ana Lazo, el socialista confirma que la relación con el alcalde David Ruiz y el equipo de Gobierno es “afable” pero escasa y normalmente no les llaman. Ruiz lamenta que la mayoría absoluta de los populares se haya traducido en “una apisonadora” que se plasma en los plenos. Asimismo, critica la actividad en redes del alcalde. El socialista acusa al popular de estar más pendiente del “postureo” que de la gestión en sí.
También Antonio Ruiz asegura que los proyectos que se han hecho en estos meses han sido gracias a la gestión anterior, pero no ve nada nuevo ni por iniciativa propia en el actual equipo de Gobierno. De hecho, les reprocha que se hayan adueñado de asuntos que se quedaron perfilados, como el arreglo del camino de la Fuente Alta. En otros casos, se han perdido subvenciones, como ha ocurrido con la ronda. De igual modo, critica que ahora no aceleren las obras del polígono de La Salina.
Respecto a los resultados de las elecciones, los achaca a varios factores. Cree que el PP absorbió los votos de Vox y a los socialistas les faltó comunicar mejor la gestión llevada a cabo, mientras que los populares basaron la campaña en promesas “que no se correspondían con la realidad, pero que la gente les compró”. Ruiz les reconoce que son “unos maestros” en el manejo de las redes. A la inversa de los otros dos grupos, el balance popular viene marcado por estado en el Gobierno local desde junio. David Ruiz no oculta que su sueño era llegar a la Alcaldía. Cree que en estos seis meses han hecho un trabajo “justo” que va “por buen camino”.
Confiesa que el peor reto al que han tenido que hacer frente han sido las facturas pendientes de pago. Aparte de sanear las arcas municipales, tiene como objetivo desbloquear la situación del polígono de La Salina. Asegura que las obras no estaban para comenzar de cara a las elecciones, como anunció entonces Antonio Ruiz. Incluso va más allá y le reprocha que hiciera este mismo anuncio “en 2019 y 2015, y las máquinas no llegaron nunca”. Insiste en que los trámites marchan bien, pero es realista a la hora de pronosticar que aún falta “un tiempo” para que las obras estén en marcha. Con todo, confía en que no se marchen más empresas de Rute.
Respecto a la oposición, coincide en que la relación es buena, aunque desearía que estuvieran “más por la labor” de trasladarles más propuestas. Si el polígono y el pago de facturas son los retos más inminentes, a medio plazo la vista está puesta en seguir embelleciendo el pueblo como Municipio Turístico, así como el arreglo de las rondas y la travesía. A largo plazo, otro reto es el futuro teatro o espacio escénico, aunque admite que será necesaria la financiación autonómica, ya que para concluirlo aún faltaría un millón de euros.
