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Aparte de formar una vez más parte del circuito provincial, la prueba tenía el aliciente de que era puntuable para el ranking andaluz
El entorno de la Sierra de Rute se ha llenado en el tercer fin de semana de marzo de bicicletas. Como en las dos ediciones anteriores, el III Rally de Ciclismo BTT “Villa de Rute” formaba parte del Circuito XCO de la Diputación. Además, este año tenía el aliciente de ser puntuable para el ranking andaluz. Ello ha supuesto un salto cualitativo y cuantitativo. No sólo se ha disparado la participación, sino que en Rute han estado algunos de los mejores ciclistas de montaña de Andalucía. Lo destacaba Carmen María García, presidenta de la Peña Rahamantah, club organizador. Según dijo, se han alcanzado los doscientos participantes. Una treintena eran locales.
- En la categoría élite, los dominadores de la prueba fueron Víctor Manuel Fernández y Laura Palma
Además, hubo quien vino expresamente por el hecho de que la prueba era puntuable a nivel autonómico. Por ese mismo motivo, se había aumentado la dificultad técnica de los circuitos, tres en total, en función de las edades y categorías. De hecho, la horquilla de los ciclistas iba de 6 o 7 años a “más de sesenta”. El circuito de promesas y principiantes era de 950 metros; el de alevín e infantil, de 1400 metros; y a partir de cadete, el circuito era de 4 kilómetros. Éste ha sido el que más se ha modificado, variando las vueltas en función de la categoría. En la manga reservada para las categorías élites y sub-23, los dominadores de la prueba fueron Víctor Manuel Fernández y Laura Palma.
García ve otro aliciente para haber aumentado la participación local, las escuelas deportivas municipales. Como recordaba el concejal del área, Francisco Jesús Fernández, las puso en marcha el Ayuntamiento, pero a instancias de la Peña Rahamantah. Como premio por esa implicación, todos los corredores locales tuvieron un trofeo de recuerdo.
Para Manuel Barea, delegado provincial de la Federación Andaluza de Ciclismo, no es casualidad que Rute haya sido de nuevo sede del circuito cordobés ni que la prueba entre en el ranking andaluz. Es la consecuencia del buen trabajo de la Peña en los años anteriores. Sus responsables lo habían pedido desde la primera edición y se ha ido avanzando “paso a paso”. Esa labor se une a un entorno único, que, además, subrayó, tiene muy cerca el casco urbano para cualquier necesidad y una explanada para aparcar. De hecho, admitió que, pese a que en Córdoba hay un gran nivel, muchos clubes o pueblos piden ser sede, pero no siempre se cumplen unos requisitos mínimos.
En esa línea, el concejal señaló que hay que aprovechar todo el potencial de la sierra para traer a nuestro pueblo el máximo número de eventos deportivos posibles. Para que todo estuviera a punto, se implicaron en torno a treinta miembros de la Peña, incluyendo a padres y madres, aparte del personal voluntario. Pese al esfuerzo logístico que requiere, Carmen María García se da por satisfecha con el resultado final y se siente con ganas de afrontar de nuevo la organización de la prueba.
