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Tenía 81 años y había nacido en Rute, donde ejerció buena parte de su ministerio como cura, aunque pasó los últimos años en una residencia de la capital
En plena jornada electoral, el domingo 10 de diciembre fallecía en Córdoba el sacerdote Gregorio Molina, a la edad de 81 años. Había nacido en Rute en 1938. Con 28 años, en 1966 fue ordenado sacerdote. Como diácono, estuvo como formador en el Seminario Menor. Entre sus cargos eclesiásticos, fue coadjutor de San Sebastián en Pozoblanco. También estuvo en la parroquia de Santiago Apóstol de Iznájar y en San Mateo Apóstol, de Lucena, siendo miembro del equipo sacerdotal de esta última. Asimismo, fue cura ecónomo de “San José” de Jauja.
- Era una persona muy querida en Rute, donde era fácil encontrarle conversando sobre los temas más insospechados
En cuanto a su Rute natal, durante el tiempo que ejerció su ministerio fue capellán de la Residencia de Ancianos Juan Crisóstomo Mangas, capellán de las Hermanas Mercedarias de la Escuela Hogar Juan de Dios Giménez y cura adscrito a Santa Catalina Mártir. Precisamente en esta parroquia, el 29 de octubre de 2016 celebró los cincuenta años de su ordenación sacerdotal. Fue una ocasión propicia para que se congregaran en torno a él feligreses tanto de Santa Catalina como de San Francisco de Asís.
Y es que don Gregorio, como le llamaban la mayoría de sus paisanos, era una persona muy querida en Rute. Sin la habitual sotana, si acaso apenas con el alzacuellos tan característico, pasaba entre la gente como otro ruteño de a pie más que como un representante del clero. Su campechanía y su cultura y conocimiento de los temas más insospechados permitían a cualquiera entablar largas conversaciones de calle con él.
Por todo ello, no es de extrañar que, aunque en los últimos meses se había retirado a una residencia en la capital, las muestras de condolencia se multiplicaran nada más conocerse la noticia. A través de las redes sociales, las hermandades y cofradías ruteñas, y mucha gente a título particular, expresaron públicamente el pesar por su pérdida. El funeral va a tener lugar este martes, a las diez de la mañana en Santa Catalina, en una misa presidida por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández.
