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Con motivo del Día Mundial sin Tabaco, la Junta Local de Rute ha repartido folletos ante el Centro de Salud y ha intercambiado cigarrillos por fruta
Mesa informativa sobre el Día Mundial sin Tabaco
El 31 de mayo se conmemora el Día Mundial sin Tabaco. Este año la efeméride llega en un momento en que la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) está intentando que se amplíen los espacios sin humo. El lema en esta ocasión es “Dime dónde estás y te diré qué humo respiras”. El objetivo para 2030 es que España tenga la primera generación de gente no fumadora. Aparte de las campañas generales de sensibilización, se suceden los actos en los municipios. En Rute, la Junta Local ha habilitado una mesa informativa ante las puertas del Centro de Salud. Además, han intercambiado con los transeúntes cigarrillos por frutas.
El director del centro, Marco Antonio Algaba, ha recordado cómo perjudica el fumar y las ventajas de dejar de hacerlo. Entre los daños más conocidos, está el riesgo de padecer cáncer de laringe, boca, esófago o vejiga. También afecta a las enfermedades del corazón o problemas respiratorios, amén de baja fertilidad en los hombres o complicaciones en el embarazo. Admite que es “complicado” dejarlo, pero una vez se consigue se mejora de inmediato la oxigenación del cuerpo y desaparece la tos.
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Victoria Garrido, presidenta de la Junta Local, ha subrayado la gravedad de la “normalización” del tabaco. Frente a eso, ha reiterado la apuesta de la AECC por los espacios libres de humo, que se ha trasladado de manera formal al Gobierno. También se ha hecho eco de la petición de la Junta Provincial para que las representantes de Rute soliciten al Ayuntamiento un espacio de este tipo. Otros dos aspectos en los que ha insistido son los daños a menores y los que ocasiona el humo por sí solo.
En esa línea, su compañera Miriam Amián, como profesional sanitaria, ha confirmado que hay unos efectos nocivos de la nicotina en sí y otros diferentes por inhalar el humo. De ahí que de cada ocho millones de personas que mueren al año por el tabaco, un millón sean fumadores pasivos, “gente que nunca ha probado un cigarro”. De hecho, incluso las colillas apagadas siguen despidiendo humo hasta 24 horas después.
