Una veintena de voluntarios de Protección Civil de Rute se forman en primeros auxilios

El monitor se valió de varios maniquíes para dar  un carácter práctico a todas sus explicaciones

El monitor se valió de varios maniquíes para dar un carácter práctico a todas sus explicaciones

No basta con poner ganas, ceder parte del tiempo libre y echar una mano. Para ser voluntario de Protección Civil es necesario un mínimo de formación. Con esa filosofía se han organizado en Rute unas jornadas de formación en primeros auxilios para este cuerpo. Víctor Márquez, responsable municipal de Seguridad y coordinador de las jornadas, adelantó que se va a intentar repetirlas con cierta periodicidad. Para el teniente de alcalde y concejal de Infraestructuras Municipales, Manuel Muñoz, con estos cursos se da “un paso más” para que los voluntarios puedan aportar un mejor servicio. El concejal resaltó que, dentro de las circunstancias económicas del Ayuntamiento, hay que intentar que los colectivos “se sientan arropados”, facilitándoles las instalaciones o cualquier otro medio. Muñoz agradeció a Juan Fernández, de la Escuela Andaluza de Técnicos en Emergencias, su aportación “altruista” para impartir el curso.

Fernández ofreció nociones en primeros auxilios, para actuar en emergencias sanitarias. No se trata sólo de que se adquieran estos conocimientos, sino de que la gente de Rute “tenga la tranquilidad” de que cuentan con este cuerpo. Lejos de ser una aportación anecdótica, el monitor insiste en que lo básico permite que luego los recursos avanzados “puedan salvar una vida”. Para sus explicaciones se valió de varios maniquíes sobre los que se simulaban los primeros auxilios. Ahí pudo demostrar además que no se necesita de primeras grandes recursos materiales, “tan sólo las manos, la boca y actuar rápido”.

Los dos máximos responsables de Protección Civil en Rute coinciden en esa necesidad de formarse. Juan Sánchez no pierde de vista que al principio “cuesta mantener la cabeza fría” pero hay que saber actuar con celeridad. Su compañero Liborio Tirado comparte la opinión del monitor de que la gente no es consciente de la importancia de este personal “hasta que pasa algo”. Tirado animó a que quien desee hacerse voluntario se ponga en contacto con ellos. Suelen rondar la veintena de colaboradores. A partir de ahora, contarán con esta formación extra, que se les ofrecerá siempre “antes de actuar”.

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