Los representantes de Araem, Faisem y el Ayuntamiento han destacado la creatividad de las personas que acuden a estos talleres
Hasta el 26 de marzo, Martes Santo, se puede visitar en el centro cívico de la calle Fresno una exposición muy especial. Se trata de una muestra itinerante de artesanía de personas que acuden a los talleres ocupacionales de Faisem, la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental. A Rute llega por iniciativa de la Asociación Ruteña de Ayuda al Enfermo Mental (Araem), que la ha organizado en colaboración con Artefacto. El horario de apertura es de cinco y media a siete y media de la tarde. Isabel Ramos, presidenta de Araem, ha dado las gracias a Juan Antonio Muñiz, director de Faisem, por la labor que realizan, y a los responsables de Lucena y Cabra, por haber traído la exposición a Rute. También ha subrayado que la sociedad moderna cada vez genera más estrés que desemboca en más enfermedades mentales. Por pura lógica, entiende que “lo que es de muchos tiene que ser una cosa normal”. Por eso, ha hecho un llamamiento para que se deje de ver la enfermedad mental como algo anormal y se trate “con cariño y respeto” a quienes la padecen.
Según Muñiz, a los talleres de Lucena y Cabra hay que sumar, en la Zona Sur, los que se imparten en Priego. La muestra que han traído a Rute incluye pinturas de Ángel Custodio Huete, un pintor para el que el responsable de Faisem no escatima en elogios, por la calidad y creatividad de su obra. También ha destacado la persistencia, muchas veces “sola e individual”, de Isabel Ramos “para eliminar el estigma de la enfermedad mental”. En este sentido, Muñiz insiste en que, en efecto, estos pacientes son personas “como cualquier otra”. En lugar de padecer un problema de cardiología, hepatitis o diabetes, por citar casos muy comunes, el suyo es de salud mental. Pero eso no significa “que tengan menos dignidad o que haya que tenerles menos respeto, todo lo contrario”.
Isabel Ramos y Juan Antonio Muñiz han agradecido al Ayuntamiento que de nuevo haya colaborado con la asociación ruteña, cediendo un espacio para acoger la exposición. Para la concejala de Cultura, Belén Ramos, esta muestra es una prueba de que el arte se puede entender como terapia. Aunque no ha dudado en realzar el trabajo de Araem y Faisem, la edil es consciente de que hay “mucho por hacer para acabar con los prejuicios” en torno a esta cuestión.
