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La asociación se gestó en Rute apenas unos meses antes de la pandemia, por lo que hasta ahora no ha podido organizar terapias comunes entre sus pacientes
Los miembros de la asociación Positívate conciencian sobre la fibromialgia
El 12 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Fibromialgia. En Rute son muchas las personas que sufren esta enfermedad poco reconocida a nivel social. Al menos, la población no es consciente de sus síntomas; a veces, ni de su existencia. Sus pacientes se agrupan desde hace un año y medio en la asociación Positívate. Su presidenta, Ángeles Caballero, confiesa que se identifica “por descartes”. No es una enfermedad mental, “pero sí degenerativa”. Se cree que sus víctimas tienen “más trasmisores del sistema nervioso que una persona normal, o están más activos”.
- Para ayudar a costear los talleres, van a llevar a cabo varios sorteos y tienen previsto repartir folletos informativos por el casco urbano
Se desconoce su origen. Como posibles causantes se barajan desde cambios ambientales hasta emocionales. Lo cierto es que el umbral de edad de la población afectada cada vez es más bajo. Pese a esa vaguedad, otro de los miembros de la asociación, Juan Arrebola, recuerda que no es “un dolor inventado”. Su compañera añade otras consecuencias, como la fatiga crónica, el deterioro cognitivo y de visión, además de problemas en las articulaciones, e incluso ansiedad o depresión. De ahí que la asociación dé cabida a otras enfermedades degenerativas.
El desconocimiento general ha tenido que convivir con el coronavirus. Apenas unos meses después de que se gestara Positívate se decretaba la pandemia. Ello ha “ralentizado” su crecimiento y promoción. No obstante, se han dado pasos para poner en marcha talleres tan pronto como las medidas sanitarias lo permitan. Además, se quiere prestar asesoramiento psicológico a los pacientes. Para ayudar a costearlo, van a llevar a cabo varios sorteos. Asimismo, tienen previsto repartir este sábado 15 de mayo folletos informativos por el casco urbano de Rute. En cuanto a la cuota de los socios, la presidenta ha recordado que son 15 euros al año y diez de inscripción.
La idea es que los diversos profesionales ofrezcan descuentos a los cincuenta asociados actuales, a falta de reuniones grupales tan necesarias en estos ámbitos. Ahora bien, todo debe estar supervisado por un especialista. Por ahora, la enfermedad no tiene cura, pero sí se pueden aliviar los síntomas por varias vías: la física, la psicológica y emocional o incluso la alimenticia. En este sentido, la pandemia ha supuesto otra traba para ese apoyo mutuo que precisan los pacientes.