Un enorme lienzo confeccionado con 3 kilómetros de hilo preside esta curiosa exposición
Springfield ha colonizado La Cuadra de Adebo. Su familia más popular, los Simpson, se hallan en Rute hasta el 12 de junio por obra y gracia de Andrés Muñoz. La sede de la asociación ecologista se ha llenado de color con los peculiares cuadros de este artista lucentino. Su responsable, Pascual Rovira, nunca ha querido desaprovechar las posibilidades de La Cuadra como “contenedor de arte”. En esta ocasión, la intensidad de la exposición incluso se puede medir: 20 kilómetros de hilo. Ésa es la particular técnica con la que trabaja Muñoz, una técnica apenas empleada en todo el mundo. Son metros y metros de hilo distintos colores los que llega a entrelazar en los cuadros que realiza. El más grande, el que preside la exposición, tiene hasta tres kilómetros.
Las recreaciones de los Simpson se remontan un año atrás, cuando las concibió para una exposición que apoyara la capitalidad cultural de Córdoba 2016. Entonces se pudo ver en la estación de autobuses de la capital. Su idea es seguir dándola a conocer y que la “familia amarilla” de Springfield sirva “de carta de presentación” para promocionar esta novedosa técnica. Según confirma, el trazado en hilo “acaba de renacer”. Curiosamente, explica, surgió en los centros penitenciarios y centros de drogodependencia. La razón resulta menos fatalista: sus internos son personas que tienen mucho tiempo, justo lo que requiere el trazado.
En su caso, tuvo que prejubilarse tras una operación de espalda. Por tanto, dispone de ese tiempo y esta tarea le “llena”. Como todo, es cuestión de adquirir práctica. El primer cuadro que trabajó, un lienzo de don Quijote, le llevó un mes; ahora asegura que podría realizarlo “en una semana”. Muñoz, que tiene el certificado de formador, está peleando por lograr la homologación de esta técnica. De esta forma, se podría impartir y que se convirtiera en una salida laboral para muchas personas. De hecho, ha apostado por los Simpson precisamente porque son muy populares y así el trazado en hilo se puede promocionar mejor.
Si la exposición original se organizó para apoyar la capitalidad cultural, a Rute ha llegado a las puertas de que los jueces visiten la ciudad para evaluarla. Anselmo Córdoba, que ha montado la exposición, es conciente de la importancia de este nombramiento para el turismo de la provincia en general. De ahí que se haya querido dar “un empujoncito”. También, de forma desenfadada, la inauguración sirvió para defender el pepino español. Para muestra, se ofreció una degustación de pepinos cultivados en las huertas de La Hoz.
