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De nuevo se encarga de impartirlos el Club Natación Rute, que tiene en la primera entrega 160 inscritos, muchos de los cuales repiten para mejorar su técnica
Poco después de que se inaugurara la temporada estival de baños en la piscina municipal, desde el pasado 3 de julio también están en marcha los cursos de natación. Como en el primer caso, están promovidos por iniciativa del Ayuntamiento. En este caso, de la organización de turnos y de impartir las clases se encarga el Club Natación Rute. Según ha apuntado el concejal de Deportes, Francisco Jesús Fernández, las primeras impresiones invitan al optimismo para que, una temporada más, se copen todas las plazas disponibles. No obstante, su compañera, la teniente de alcalde Ana Cobos, ha instado a contactar con el Servicio Municipal de Deportes (acercándose a la misma piscina o llamando al teléfono 957 53 29 18), por si hubiera alguna vacante.
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Cobos también ha recordado que se mantienen los precios del verano pasado, 23 euros por curso. Como ella misma había apuntado durante la inauguración de la temporada de baños, los cursos se dividen en tres niveles de aprendizaje, con cinco horarios en cada jornada, dos por la mañana y tres por la tarde, incluido un turno para adultos. Cada curso dura doce días hábiles. Así la primera tanda se prolongará hasta el 18 de julio, la segunda del 19 al 4 de agosto y la tercera y última del 7 al 24 del mes que viene.
El coordinador de los cursos y uno de los entrenadores del club, Manuel Pérez, ha confirmado que apenas hay alguna plaza en la primera hora. En el resto incluso hay gente “en lista de espera”. En su opinión, esa demanda indica el grado de satisfacción de cómo se les enseña. De momento, sumando todos los turnos, en el primer curso hay 160 personas. Siguiendo esa proporción, al término del verano habrán contabilizado unas quinientas matrículas. Muchas, según ha precisado, son de gente que, tras el primero, repite. Después, agosto, por las vacaciones, es un mes “más irregular”.
Pérez ha puntualizado que se les intenta agrupar por niveles, pero también por edades. Al haber suficientes monitores, y dado que las dimensiones de la piscina lo permiten, en una misma hora simultanean distintos niveles con los más pequeños. En cambio, con jóvenes de más edad los entrenamientos se hacen “a piscina completa”. Lo que sí ha remarcado es que desde el principio se les enseña “todos los estilos”.
El colofón a estos cursos lo pondrán los distintos campeonatos locales. A lo largo del verano se sucederán los de natación y waterpolo. También la vista está puesta en las citas comarcales y provinciales. No en vano, Pérez ha señalado que el aprendizaje de estos menores sirve a su vez de cantera: mucha gente que tiene aquí su primer contacto con la piscina acaba ingresando en el Club Natación Rute.
