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Con esta actividad se pretende activar recursos personales con el objetivo de generar vitalidad, entusiasmo o motivación en las personas que la practican
La Junta Local de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) apuesta de nuevo por ofertar un taller de biodanza. Según ha informado una de las personas responsables de la Junta Local y encargada de promoverlo, Victoria Garrido, el primero contó con una respuesta “muy buena”. Se llevó a cabo en la sede la Junta Local y participaron veinticinco personas. En esta ocasión, se va desarrollar en la Casa de la Cultura, en el aula que se encuentra junto a la emisora municipal, Radio Rute. Se va a impartir todos los lunes, en horario de siete a nueve de la noche. Las personas interesadas en inscribirse pueden hacerlo en la sede de la Junta Local en los bajos del mercado este viernes, en horario de seis y media a ocho de la tarde.
- Las personas interesadas en inscribirse pueden hacerlo en la sede de la Junta Local el viernes en horario de seis y media a ocho de la tarde
Victoria Garrido ha informado de que tendrán prioridad todos los enfermos de cáncer o sus familiares. No obstante, si no se completan las plazas se cubrirá con el resto de ruteños o ruteñas interesadas. La encargada de impartir el taller es Aline Reis, doctora en Educación, pedagoga y facilitadora de biodanza. Aline Reis explica que la biodanza es una práctica que pretende activar los recursos personales que poseemos, con el objetivo principal de generar vitalidad, entusiasmo o motivación en las personas que la practican. Según la facilitadora, la biodanza activa el humor endógeno.
Aline Reis ha dicho que con la biodanza no se pretende provocar momentos de felicidad concretos. Fundamentalmente, lo que se busca es propiciar una alegría interna, pausada y prolongada en el tiempo. Reis afirma que este tipo de práctica termina redundando positivamente en nuestra salud. Asegura que las personas que practican biodanza regulan mejor su sueño y su estado de ánimo. En las sesiones están presentes tres elementos: la música, el movimiento y el encuentro entre personas. Las clases constan de dos partes. La primera, de carácter más lúdico y activa, cuenta con ejercicios alegres, de desinhibición o que incluyen saltos. La segunda parte es más pausada y de conexión con nuestras emociones.