La defensa de una autonomía exenta de exclusiones y la entrega de los Premios Villa de Rute protagonizaron el día de Andalucía

Los  homenajeados  de los Premios Villa de Rute

Los homenajeados de los Premios Villa de Rute

Rute celebró su particular día de Andalucía con un acto público que incluyó el discurso institucional a cargo de la concejala de Cultura, Magdalena Baena, la entrega de los Premios Villa de Rute y la colocación de la insignia a los nuevos integrantes de la Banda Municipal de Rute. Estos jóvenes vistieron por primera vez el pasado día 28 de febrero el traje de la banda. La edil aprovechó su intervención  para  recordar brevemente la historia de nuestra autonomía. Repasó la Andalucía de la época de los Tartesos, la del imperio romano, o la correspondiente al periodo árabe, donde Al-Andalus se convirtió en el centro cultural más importante de Europa. La concejala también recordó tiempos peores donde la revolución industrial, la oligarquía y un reparto de tierras latifundista llevó a los andaluces a emigrar. Sin embargo, para Magdalena, “afortunadamente”, la actualidad se está escribiendo “de diferente manera”. Aun así, considera que es “mucho” el camino que hay que recorrer para ocupar “el lugar que siempre nos ha reservado la Historia”.

Baena habló de la aportación de Andalucía a la cultura y al arte en general: “Ha sido tan grande –dijo- que en muchos casos ha pasado a identificarse lo español con lo andaluz”. En este sentido, aludió  a Ortega y Gasset y  dijo que la lucha de los andaluces por su autonomía “siempre ha estado exenta de particularismos excluyentes”.

Respecto a su articulado, se refirió a la protección integral contra la violencia de género, la equiparación de los derechos de las parejas no casadas, el testamento vital y la dignidad ante el proceso de la muerte, la laicidad de la enseñanza, el consejo genético y la medicina predictiva, el derecho a una renta básica y una buena administración o el derecho a vivir en un medio ambiente equilibrado, sostenible y saludable. Magdalena Baena se detuvo en el preámbulo del texto constitucional, donde se hace constar que “igualdad no significa uniformidad”. Respecto a las singularidades y cuestiones diferenciales que coexisten en España, la representante municipal significó el hecho de que Andalucía “los respeta y reconoce”. Pero con la misma rotundidad añadió que no se puede consentir que las  diferencias “sirvan como excusa para alcanzar determinados privilegios”.

Más allá del discurso institucional, como cada año los grandes protagonistas de la jornada fueron las personas y colectivos que el Gobierno municipal reconoció por su labor en la sociedad. Los homenajeados este año con los Premios Villa de Rute han sido: José María Caballero, quien se licenció en Medicina y Cirugía en 1983 con un brillante expediente académico, ha  ejercido como médico y asumido responsabilidades directivas y de gestión en el ámbito de la Sanidad. Pese a ello, Caballero reconoce que este premio “es algo que no olvidará” y que le servirá de estímulo para seguir ejerciendo su labor lo mejor que pueda.

A Manuel Villén se le galardonó por su trayectoria profesional. Ha sido fiscal jefe de Málaga hasta el año pasado, vocal del Consejo Fiscal, y condecorado con la Cruz de Honor de la orden de San Raimundo Peñafort y con la Medalla al Mérito Policial. Manuel Villén se  mostró “muy  satisfecho” por el premio recibido en Rute, por los lazos familiares que le unen a este pueblo y del que dice sentir “añoranza, cómo todos los que nos sentimos de aquí y estamos fuera”.

El premio al Deporte se otorgó a la Sociedad Deportiva de Pescadores de Rute, fundada en 1955. Recogió el galardón su actual presidente, Miguel Amorós, quien agradeció a la corporación el reconocimiento a la labor que vienen realizando desde hace ya muchos años. En cuanto al ámbito de la Cultura el premio ha correspondido a Bartolomé Sánchez, quien dedicó todo una vida a la docencia y ha logrado publicar tres novelas tras su jubilación. Para Bartolomé Sánchez es “algo que no esperaba” y que le llena de enorme orgullo.

Finalmente, se entregó a título póstumo un premio a Gabriel Porras Caballero, “el niño miliciano”, por su incansable lucha por la libertad y su inestimable colaboración en muchos actos relacionados con la Recuperación para la Memoria Histórica. Recogió el premio uno de sus nietos, quien aprovechó para hablar de la hospitalidad de la gente de Rute y recordar algunas de las cosas que sobre nuestro pueblo le contaba su abuelo.

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