A nivel cultural, noviembre viene asociado en Rute al Ciclo de Música Clásica de Otoño. Desde hace 18 años, la delegación de Cultura propone esta oferta que se ha consolidado gracias a la fidelidad del público. Durante cuatro sábados se puede disfrutar de otras tantas actuaciones en vivo para un auditorio que, además de fiel, no es tan minoritario como podría suponerse. En esta edición, la de la mayoría de edad, se ha encargado de abrir el ciclo la Coral Polifónica Bel Canto. En palabras de la concejala del área, María Dolores Peláez, no sólo estamos ante un referente de la música en Rute. La coral ya es conocida en toda la provincia, en buena parte de Andalucía e incluso más allá de nuestra comunidad autónoma. Por otra parte, la afición a la música en el municipio, tanto en audiencia como en intérpretes, permite hacer de la necesidad virtud. Dicho de otro modo, cuando las arcas municipales no andan muy sobradas, se puede mantener con artistas locales de gran nivel un ciclo que en otros lares estaría como mínimo interrumpido. Peláez da un argumento incontestable: cuando de fuera llaman a los artistas ruteños para que actúen “por algo será”.
La novedad de este año ha sido el escenario elegido para empezar. Cumpliendo la premisa de llevar el ciclo a todos los espacios públicos de Rute, se ha estrenado para tal fin el edificio cultural de la calle Fresno. Para José María Molina, vicepresidente de la coral, el nuevo escenario tiene una acústica bastante buena. Por eso, la concejala confirmó que desde ahora entra a formar parte del circuito de conciertos que celebren en el municipio. Al mismo tiempo, encaja con una idea que la coral quiere reivindicar: no sólo cantan música sacra. Para las iglesias y ermitas quedan conciertos como el de Navidad, el 21 de diciembre, que ya están preparando. El resto del repertorio se reserva para otro tipo de recintos.
Porque como subrayan sus responsables, cultivan más géneros. Su presidente, Francisco José Ruiz, recuerda incursiones en la música ligera o las bandas sonoras, a través de colaboraciones con colectivos como Artefacto. Ruiz cree que no estamos ante un fenómeno exclusivo de Rute. Asentada en el norte desde hace tiempo, en el sur del país cada vez es mayor la afición a la música vocal. De momento, en esta ocasión el repertorio fue íntegro de zarzuela. Las voces de la coral recrearon piezas de los autores más significativos del mal llamado “género chico”, como Torroba o Sorozábal. Además, como empieza a ser costumbre en sus actuaciones, el director Miguel Arjona invitó a dos amigos de su círculo musical para que se sumaran a la fiesta. Esta vez fueron el tenor Francisco Ariza y la soprano Carmen Buendía.
Tras este concierto inaugural, la siguiente actuación corre por cuenta de otro referente musical de Rute como es la Banda Municipal. Será el día 22 en el Edificio Alcalde Leoncio Rodríguez, con el habitual Concierto de Santa Cecilia. A la semana siguiente, la música se traslada hasta la ermita de San Pedro, con un dúo de piano y contrabajo. Otro dúo, de arpa y flauta, se encargará de cerrar el ciclo, pero será en diciembre, el día 13, tras el paréntesis de los actos de la Constitución y el puente de la Inmaculada. Este concierto final tendrá lugar en la Vera Cruz.
