De nuevo, uno de los momentos más entrañables de la jornada se produjo con la visita de los Reyes Magos a la residencia de ancianos
Terminaron las fiestas navideñas y, como siempre, se echó el telón con la jornada más ilusionante. El 5 de enero no sólo genera expectación entre los pequeños. En realidad, habría que hablar de ilusión de todos, a juzgar por la presencia de gente de diversas edades en la cabalgata de Reyes. Sus Majestades de Oriente tuvieron una intensa jornada, que arrancó desde la sobremesa con la visita a la Residencia de Ancianos Juan Crisóstomo Mangas. Allí compartieron un rato entrañable con las personas de la tercera edad. Desde ese momento, todos los actos se sucedieron de forma ininterrumpida. Después de la residencia, los Reyes Magos se dirigieron al Ayuntamiento. En la puerta fueron recibidos por las autoridades locales. A continuación, siguieron a pie hasta el Círculo de Rute, para entregar los regalos que antes habían sido solicitados al Cartero Real. Y para concluir, se encaminaron al Portal de Belén, antes de arrancar la cabalgata propiamente dicha, que se desarrolló sin incidencias. Era la principal preocupación del concejal Antonio Granados. Tanto la Policía Local como el personal voluntario de Protección Civil velaron para que no hubiera nada que lamentar por la acumulación de gente cerca de las carrozas.
Esta vez el número de carrozas se ha quedado en cinco: las tres de los Reyes Magos, por cuenta del Ayuntamiento; y dos de colectivos ruteños, una de la guardería Arcoíris y otra del AMPA del colegio Fuente del Moral. De nuevo el acompañamiento musical corrió a cargo de la Banda Municipal y la agrupación Santo Ángel Custodio, que estrenó nuevo uniforme para la ocasión. La ropa, con inspiración oriental en un guiño al estilo del cortejo del rey Baltasar, causó admiración entre los asistentes y fue uno de los comentarios habituales de la noche. También los propios Reyes Magos estrenaban ropajes este año.
La comitiva desfiló por las calles céntricas de Rute. A lo largo del itinerario, aparte de los caramelos, también se repartieron juguetes, gracias un año más a la colaboración de Juguetes Roldán y Reclamos Tenllado. La cabalgata tuvo su continuidad en la tarde del 6 de enero, en este caso por las aldeas ruteñas de Zambra, Llanos de Don Juan y El Nacimiento. Por otra parte, es ya costumbre que en esta noche de Reyes se haga público el ganador del concurso de escaparates y comercios, convocado por la concejalía de Festejos. En esta ocasión, el ganador ha sido el escaparate de la Floristería Del Pilar. El jurado quiso valorar la combinación del género que venden con la instalación de un portal de Belén.
Roscón de Reyes
