El coronavirus se cobra la decimocuarta víctima en Rute

  • Ha sido además la primera persona infectada por la Covid-19 que fallece fuera del entorno de la residencia, tras permanecer 41 días en Infanta Margarita

El fallecido había permanecido durante más de un mes en la UCI del hospital comarcal de Cabra

El coronavirus ha vuelto a mostrar su lado más trágico en Rute al cobrarse una nueva víctima mortal. Se trata de la decimocuarta desde que esta pandemia alcanzó al municipio. A su vez, es la primera persona de la localidad que fallece fuera del entorno de la residencia. Pese a que llevaba unos días libre del temido SARS-CoV-2, las secuelas que ha dejado a la postre en su cuerpo han sido letales. De hecho, según ha confirmado un portavoz familiar, el fallecimiento ha sido a consecuencia de haber contraído el coronavirus y se han aplicado los protocolos establecidos para el caso.

  • Pese a estar destrozada, la familia ha querido agradecer el comportamiento del personal de la UCI de Infanta Margarita

Lógicamente, la familia está destrozada, porque había síntomas de mejoría que dieron pie a mantener hasta el final un hilo de esperanza. Pese al trance que atraviesan, agradecen las muestras de condolencia, porque se trataba de una persona muy conocida y activa en la vida social y cofrade de nuestro pueblo. De modo especial, han querido trasmitir un mensaje de gratitud al personal sanitario del hospital Infanta Margarita de Cabra que ha atendido a la víctima, de 77 años. Aseguran que durante los 41 días que ha permanecido ingresado en la UCI el comportamiento y la entrega de todos, desde médicos a celadores o enfermeros, han sido siempre ejemplares.

La noticia llegaba además en un lunes que fue un día de conmoción en la residencia Juan Crisóstomo Mangas y en la sociedad ruteña en general. A primera hora de la mañana, un usuario de 77 años, había decidido quitarse la vida. Como ha recordado el alcalde Antonio Ruiz, estamos ante una persona “que simboliza el voluntariado en Rute”. En efecto, antes de ser usuario, había colaborado “muchísimo” en distintas actividades de la residencia. De hecho, esa labor altruista fue reconocida con el Premio Villa de Rute a las Relaciones Humanas en 2015. Por todo ello, Ruiz no oculta que fue un día “muy duro”.

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