Editorial Julio- Agosto 2021

La presente publicación es un fiel reflejo de lo acontecido en nuestro pueblo en el último mes y medio. Durante estas semanas han concluido las obras de la carretera de Las Salinas, una vía de comunicación de gran interés por ser una las salidas principales del polígono industrial y de conexión con la autovía. En el mismo periodo también han finalizado las obras de la carretera de Las Erillas, ésta de acceso a la localidad de Cabra y, por tanto, a nuestro hospital comarcal de referencia, Infanta Margarita. Por otra parte, en estas últimas semanas se han llevado a cabo obras de saneamiento en diferentes urbanizaciones del municipio y se han embellecido algunas plazas o rincones. Además, Rute cuenta con una nueva fuente, una gran fuente que no ha sido del agrado de todos los vecinos. Para algunos, por sus dimensiones, su ubicación no ha sido el lugar adecuado. Otros hubieran preferido una fuente de corte más tradicional. Sin embargo, a otros sí les ha gustado la fuente y se ha convertido en el lugar perfecto para hacer las fotos del verano.
Se trata de una actuación costeada íntegramente por la Junta de Andalucía y que forma parte las inversiones que el Ayuntamiento puede afrontar por haber sido nombrado Municipio Turístico de Andalucía. Vendrán más actuaciones de este tipo, y el tiempo juzgará si contribuyen a hacer de Rute un pueblo más bello y transitable. En esa línea también en julio se ha inaugurado una ruta para dar a conocer el paso de Rafael Alberti por Rute, otro reclamo cultural y turístico para todos los que nos visitan. Este poeta de la generación del 27 vivió en Rute durante dos temporadas y aquí gestó parte de su incipiente poesía. Su vínculo con el pueblo, al que regresó en los años 90 para ser nombrado arriero de honor de Adebo, no debe olvidarse nunca.
Por otra parte, no queremos dejar de lado la lógica preocupación de los vecinos y vecinas de la barriada del PPR-I. En este barrio joven se pretende instalar un salón de juegos. Una madre valiente, en representación del resto de vecinos, se plantó en el pleno municipal de julio para dejar claro que ese tipo de negocios no supone riqueza para la población sino la ruina de muchas familias. En septiembre sabremos si la normativa permite o no que este salón de juegos pueda ubicarse en ese barrio. Al margen de lo que marque dicha normativa, lo que sí está claro es que el Ayuntamiento debe velar para que no se deteriore un barrio en el existen muchas familias jóvenes con hijos y que está dotado con instalaciones deportivas y un Centro de Educación Infantil.
Por lo demás, esta edición ve la luz en la antesala de los días grandes de las Fiestas Patronales. De nuevo son unas fiestas condicionadas por la Covid-19 por segundo año consecutivo no se desarrollan como es habitual. Se han podido mantener los cultos religiosos, como el triduo, la novena e incluso los cantos a la Virgen a través del pregón de las fiestas. Sin embargo, la tan ansiada salida procesional de la Patrona, en el día grande de la Virgen, no será como siempre. Tampoco los vecinos y vecinas pudieron disfrutar del tradicional Traslado de la Virgen desde su ermita a la parroquia, recorriendo su barrio. El trayecto esta vez fue breve y emotivo, pues para algunos suponía ver a la Virgen en la calle desde el comienzo de la pandemia. No obstante, en las calles del pueblo han sonado los cantos de los Hermanos de la Aurora.
Además, devotos y carmelitas han podido recrearse en una magnífica publicación que ha corrido a cargo del cronista de la Villa y maestro impresor Manuel García Iturriaga, y del historiador Luis Jiménez Cobos. Entre ambos han elaborado una crónica que repasa el camino que fue necesario recorrer hasta conseguir la Coronación Canónica Pontificia de la Virgen del Carmen, el 28 de julio de 2018.
Desde entonces han pasado tres años, los dos últimos marcados por la pandemia. Han sido unos años en los que pueblo que ha sufrido. Nunca olvidaremos a quienes se fueron antes de tiempo afectados por esta enfermedad; tampoco la situación vivida en la Residencia de Ancianos Juan Crisóstomo Mangas en abril y mayo del año pasado. Sin embargo, las Fiestas Patronales, pese a todo, ofrecen momentos de reencuentro, de calma y consuelo religioso, e incluso la posibilidad de recordar a los que ya no están y lo para ellos significaban estas fiestas.
Por tanto, afrontamos unas fechas en las que vuelven al municipio ruteños y ruteñas que, por diversos motivos, hace mucho tiempo que dejaron de vivir en su pueblo natal. Coincidiendo con estos calurosos días estivales y en la antesala de estas particulares Fiestas Patronales, presentamos una publicación a todo color. Es éste un periódico que comienza a reflejar cómo poco a poco nuestro pueblo retoma su rutina. Entre otras noticias, recoge la labor de empresas que han sido galardonadas, como Portaequipajes Cruz, o paisanos que han sido reconocidos como Hijos Predilectos de la Subbética, como es el caso de Francisco de Paula Sánchez Zamorano. Ambos galardones deben suponer un orgullo para nuestro pueblo. También las actividades culturales se han incrementado durante el verano. Queremos concluir haciendo mención a otra publicación local que ha visto la luz en estos días. Se trata de otra crónica local. En esta ocasión, no referimos a la narración de Manuel Cuenca Cabeza, un hijo nacido en Llanos de Don Juan y catedrático emérito de la Universidad de Deusto, que nunca olvidó su pueblo. El suyo es un relato de los tiempos por él vividos en esta aldea ruteña. Se trata de un documento inédito del devenir de las distintas familias que han formado parte de Los Llanos, un testimonio imprescindible para generaciones venideras y para comprender la idiosincrasia de la aldea.

Deja un comentario