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La inversión de Diputación es de trescientos diez mil euros y se prevé terminar en cuatro meses, en los que se ensanchará los tramos de calzada más estrechos
Ya están en marcha las obras de mejora y adecentamiento de la carretera comarcal CO-6213, entre Cabra y la aldea ruteña de Llanos de Don Juan, cuya titularidad corresponde a la Diputación de Córdoba. Conocida popularmente como “Las Erillas”, se trata de una vía usada sobre todo por olivareros y agricultores de la zona. Comprende una longitud total de 7,85 kilómetros entre los términos de Lucena y Cabra. Aunque no se ubica en el término municipal de Rute, es muy transitada por personas de nuestro pueblo, bien para acceder a sus fincas o para dirigirse al Hospital Infanta Margarita. No en vano, Francisco Palomares, diputado provincial de Medio Natural y Carreteras, asegura que es “la conexión de menor recorrido” entre Rute y Cabra.
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Según ha detallado, las obras cuentan con un presupuesto de trescientos diez mil euros, incluidos en el Programa de Inversiones de la Red Viaria de Titularidad Provincial 2020. El plazo de ejecución es de cuatro meses, aunque Palomares cree que estará concluida antes. La carretera se divide en dos tramos. El primero se encuentra en buen estado, con un ancho de ocho metros. Por eso, la actuación se centra en el segundo tramo, cuyo ancho se reduce a 5,5 metros. Además del ensanche de la vía en la medida de lo posible, se va a reasfaltar y se van a reforzar las cunetas. Ello a su vez permitirá tomar con más seguridad las curvas más cerradas de esta carretera.
Por su parte, Antonio Ruiz, en su doble condición de alcalde de Rute y presidente de la Diputación, ha insistido en que las vías de comunicación de nuestro municipio atraviesan “un momento dulce”. Como ha recordado, en los últimos años se ha acondicionado la carretera de Encinas Reales, para acceder a la autovía A-45. Además, se ha arreglado la carretera de Gaena y ya se está actuando en la de Las Salinas. Por tanto, cree que nunca antes “había coincidido que todas estas vías estuvieran en el mejor estado posible”.
Según Ruiz, contar con unas buenas carreteras permite cumplir un doble fin. Por un lado, contribuye a fijar la población, dando un servicio a los agricultores. Al mismo tiempo, para municipios como Rute, Iznájar o Lucena las vías de comunicación son fundamentales para un sector estratégico como el turismo. Es, en suma, un “factor de lucha contra el despoblamiento y factor de desarrollo económico”.
