Contrastes propios de una jornada de huelga: la mayoría de las empresas del polígono de La Salina han abierto, mientras que en el centro, en una calle de referencia como la Del Pilar, muchos comercios han permanecido cerrados
El 14 de noviembre había quedado marcado en el calendario como el día de la novena huelga general en la historia reciente de la democracia española, y la segunda que se convoca durante el Gobierno popular de Mariano Rajoy. Según la parte que se pronuncie, la valoración del seguimiento es casi diametralmente opuesta. Los sindicatos sostienen que ha sido “masivo” y superior al de la convocatoria de marzo. Por su parte, las fuentes gubernamentales ponen el acento en la “normalidad” de la jornada. Es el típico día de contrastes, tanto en las cifras que se manejan, según las fuentes, como en el seguimiento de la convocatoria, según los distintos sectores. Este último aspecto se ha podido comprobar en Rute, donde hay que analizar por separado cada sector para evaluar la incidencia. Con todo, si por normalidad se entiende la ausencia de incidentes significativos, la jornada ha discurrido en el municipio por cauces normales.
En el mundo de la industria, en el polígono de La Salina sólo ha cerrado una empresa. Algunas han mantenido las persianas bajadas, al menos a primera hora de la mañana, pero con los coches aparcados al lado y los trabajadores dentro. Aun así, muchas han tenido sus puertas abiertas como los demás días. Es el caso de Cruzber, donde todos los empleados han acudido a su puesto. Según una de sus responsables, María del Carmen Cruz, han estado atendiendo pedidos “de cualquier parte de España como otros días”. Sí ha habido casos en que les han comunicado que acudirían “con furgonetas más pequeñas”. Por tanto, han decidido atender los pedidos de urgencia y aplazarlos cuando tuvieran “alguna mercancía más grande”. En el casco urbano, también han funcionado con normalidad buena parte de los comercios ruteños. Sin embargo, ha sido justo en el centro y en concreto en una calle de referencia como es la Del Pilar donde ha habido más establecimientos que han optado por no abrir sus puertas.
En el sector público, la incidencia también ha sido desigual. El respaldo más llamativo se ha dado en el mundo de la Educación. En concreto, en el colegio Fuente del Moral, el personal docente y no docente suma 36 trabajadores: 31 profesores, dos monitores, un conserje y dos responsables del aula matinal. Han secundado la huelga 19 docentes, uno de los monitores y los dos del aula matinal. Respecto al alumnado, de los 469 escolares han asistido a clase 147, que han sido reagrupados por niveles y “convenientemente atendidos”, según el secretario José Antonio Tejero. En Ruperto Fernández Tenllado, sólo dos de los trece profesores han respaldado la huelga. Los otros once han asistido a clase, así como el conserje y la administrativa. Según la jefa de estudios, Remedios Sánchez, donde más se ha notado la incidencia ha sido en 6º. De 24 escolares, sólo han ido a clase 6. En total, de 220 alumnos que tiene este colegio, han acudido a clase 152, y han faltado los 68 restantes. Por último, en Los Pinos, su director, Pedro Pérez ha sido uno de los que ha hecho huelga, por lo que no ha podido aportar más información de cuántos compañeros han respaldado la convocatoria.
Por lo que se refiere a la Enseñanza Secundaria, la incidencia se ha notado más entre los escolares. De los 57 profesores que integran la plantilla del IES Nuevo Scala, el director Juan Manuel Terrón ha confirmado que se han sumado once a la huelga. También la han secundado cuatro de los seis trabajadores que conforman el personal no docente de por la mañana. Sin embargo, la asistencia a clase por parte de los alumnos no ha pasado del 10%. Aunque el centro cuenta con 850 matrículas, apenas unos ochenta estudiantes han asomado a las aulas.
Sin salirse del ámbito público, la incidencia de la huelga es más difícil de precisar en servicios como la Administración local. Así, en principio, el seguimiento entre los trabajadores del Ayuntamiento ha sido escaso. En este sentido, hay que destacar que Radio Rute no ha podido ofrecer su programación habitual, ya que el personal de la emisora municipal ha decidido secundar la huelga. Con todo, habrá que esperar hasta que el secretario disponga de todos los datos de las distintas áreas y dependencias municipales, así como de quienes tienen turno de tarde, para hacer una evaluación final. Algo parecido ocurre con el Centro de Salud de Rute, donde el cómputo del seguimiento tampoco puede ser matemático. Hay más de treinta personas adscritas de un modo u otro al centro, por turnos o por días. Lo que ha matizado la directora Encarnación Siendones es que, de las 23 que “por turno” debían acudir en esta jornada, sólo ha faltado una por huelga.
