Aumentan el número de consultas a la oficina y disminuyen los fondos estatales para el funcionamiento de la misma.
El dinero destinado a la atención del colectivo inmigrante a través de los fondos autonómicos y estatales ha sufrido un recorte drástico durante 2010, siendo el Ayuntamiento de Rute uno de los perjudicados. A nivel provincial se han destinado 468.000 euros durante el año pasada a la acogida e integración de inmigrantes. Unas subvenciones que provienen de dos fondos, uno el andaluz, el Fondo Autonómico de Inmigración y otro nacional, el FAIREA, Fondo Estatal de Apoyo a la Acogida y la Integración de Inmigrantes y al Refuerzo Educativo de los mismos en Andalucía)
Estas aportaciones económicas suponen para muchos municipios una importante ayuda en las tareas de acogida de las personas que acuden a la llamada de las diferentes campañas agrícolas que se desarrollan en la provincia. De hecho durante el 2010 se incrementó el número de consultas realizadas a la Oficina Local de Inmigración que pasaron de las 279 personas atendidas durante 2009 a las 345 de 2010. Un aumento que la responsable de la oficina, Cristina Rodríguez, atribuye “una mayor temporalidad y precariedad laboral” y que ha provocado “mayor movilidad de las personas inmigrantes”, quienes se ven obligadas a desplazarse de unos lugares a otros en busca de un trabajo.
Las principales consultas que se realizan en la oficina local suelen ser de carácter jurídico, relacionadas con la primera acogida, la vivienda o el empleo. Siendo las personas de procedencia marroquí, seguidas de las de Rumania y las de los países latinoamericanos las que más demandas realizan. Sin embargo, pese a que la demanda lejos de disminuir ha aumentado, el Ayuntamiento de Rute recibió el año pasado el sesenta por ciento menos de la subvención que venía recibiendo en años anteriores. Así durante 2010, de los fondos estatales, FAIREA, el consistorio percibió 10.554,37 €, frente a los 28.616,17 euros que recibió durante 2009.
Durante los últimos cuatro años, a excepción del pasado, el ayuntamiento recibía una subvención que siempre ha superado los 26.000 euros y que cada año había ido en aumento. Hasta ahora este dinero ha permitido el funcionamiento y mantenimiento de la oficinal municipal de atención al inmigrante. La concejala de Servicios Sociales, Ana Lazo, ha mostrado su satisfacción con el “buen funcionamiento de esta oficina” y considera que “se trata de un servicio que hay que seguir prestando”. Es por ello que el ayuntamiento se ha visto obligado a asumir los gastos de contratación de personal necesario para que esta oficina continúe abierta, dado que última subvención recibida para tal fin ha sido totalmente insuficiente.
