Stand y espectáculos nos trasladan a la época del medievo
Dentro del mercado podemos parar en una taberna con comida típica o en un puesto de dulces caseros, pero también hay stands dedicados a la artesanía, la cerámica y un sin fin de productos autóctonos. Igualmente, los más pequeños pueden disfrutar de ponis, castillos hinchables y del ambiente que se respira en este mercado. Sin duda, la música y la animación de calle con personajes ataviados de época son los principales reclamos de un mercado que cuenta con trovadores, bailarinas, músicos, soldados y toda una serie de espectáculos que nos trasladan a la época del medievo.
Según el teniente de alcade, José Macías, se ha apostado por una iniciativa que considera que va a resultar “muy atractiva” y de la que van a poder disfrutar todos los vecinos. Pedro Fernández es uno de los comerciantes que acude a este mercado y señala que la gente “compra, baila y consume con gusto”. Fernández asegura que en el mercado se encuentran productos “totalmente artesanales”.
Con actividades de este tipo se pretende, según la concejala de Cultura, Magdalena Baena, complementar la actividad turística de Rute durante estas fechas. El objetivo es que las personas que nos visitan “se vayan satisfechas y piensen en volver a Rute”. Al mismo tiempo, permite ofertar una actividad también interesante para los ruteños.
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