Participantes en la mesa redonda
Seguir apostando por contenidos formativos y reforzar la cooperación entre los distintos protagonistas del proceso educativo. Son algunas de las conclusiones extraídas de la clausura de las Escuelas de Padres. El acto contó con una proyección audiovisual y una mesa redonda con personas relacionadas con ese proceso. Cuestiones como qué entendemos por educación, a quién o quiénes corresponde educar o cómo se educa fueron abordadas por representantes de los sectores implicados y de la vida social de Rute. El papel tradicional que ha desempeñado la escuela ha cambiado. Igualmente, se ha diversificado el modelo familiar existente: padres o madres viudas, divorciados, parejas heterosexuales y homosexuales…
Hay quien piensa que todo tiempo pasado fue mejor. Sin embargo, no siempre es así. Francisco López, psicólogo clínico y coordinador de las Escuelas de Padres, no comparte esa visión tan derrotista. Otra cosa es que los medios “sobredimensionen” cualquier episodio negativo. Aun pensando que estos casos son minoría, sí detecta que, como en otras facetas de la sociedad, estamos asistiendo a situaciones de “fuertes contrastes”.
Fruto de ello, con frecuencia se da una “desconfianza” generalizada entre las partes implicadas. En este sentido, el psicólogo insistió en que hay una etapa en que la calle se convierte en el principal elemento educativo. Habló de la necesidad de recuperar la confianza en el otro, en la capacidad que tienen otros padres, los profesores u otras personas del entorno para contribuir positivamente en la educación de los más jóvenes.
Ésta es la cuarta edición desde que las Escuelas en Padres se pusieran en marcha, auspiciadas por el Ayuntamiento. Para el teniente de alcalde, José Macías, la iniciativa “ha merecido la pena”, a juzgar por la participación de los progenitores en estos años. Por este motivo, se va a seguir apostando, y renovando ideas como la incorporación de un temario escrito. El proyecto, por lo tanto, se puede dar por “consolidado”, toda vez que la gente “sigue demandando contenidos de este tipo”.
Macías también se refirió a la opción de cambiar el formato de la jornada de clausura. Si hasta ahora se había celebrado un encuentro de AMPAS con talleres, y presencia de expertos de fuera, en esta ocasión se ha buscado una mesa redonda y la proyección audiovisual. Coincidiendo con el coordinador, el teniente de alcalde cree que es necesario circunscribir todas las facetas del mundo educativo a la realidad de Rute.
En el reportaje audiovisual participaron personas de diferentes sectores del municipio. El director del Instituto de Educación Secundaria, Juan Manuel Terrón, se atrevió a señalar responsabilidades concretas. Desde el punto de vista académico, echa de menos la “falta de voluntad” por superarse de los alumnos. Considera que éstos no fracasan por incapacidad, dado que el hecho de obtener una titulación básica no debería ser un asunto que los padres cuestionen.
Juan de Dios Pérez, empresario, presidente de la Junta Local de la Asociación Española Contra el Cáncer y padre, tiene claro que es un error dejar a los hijos “subsidiados afectiva y económicamente”. Como empresario, cree que se les ha de inculcar el concepto de sacrificio para conseguir metas. Los padres deben servir como ejemplo de pericia para conciliar los sentimientos personales y los fines profesionales.
Para el representante del AMPA “El Junquillo”, Antonio Molina, sería necesario fomentar las relaciones entre profesores, padres y profesionales, “con más frecuencia” y no sólo cuando hay problemas. En este sentido, el párroco Pablo Calvo afirma que hay que abandonar “el sentido de autosuficiencia” que existe en la sociedad, pues todos podemos aprender de los demás y contribuir a ofrecer una mejor educación. Calvo sostiene que se ha perdido la apuesta por “la formación integral” del individuo.
Éstas y otras muchas más cuestiones fueron algunas de las aportaciones que precedieron a la mesa redonda. En ellaparticiparon la concejala de Educación, y profesora, Magdalena Baena, dos docentes más, Pedro Pérez y Abundi Alba, dos padres del municipio, Pedro Trujillo y Ernesto Hernández, y un joven estudiante, Antonio José Gómez. En este foro de debate se habló de la necesidad de que existan espacios públicos para que los niños jueguen libremente.
En este sentido, Pedro Trujillo, padre de tres hijos, es además arquitecto y considera que es un aspecto “que podría tenerse más en cuenta cuando se desarrollan nuevas zonas en el municipio”. Pedro Pérez aludió a la necesidad de un pacto por la Educación, para que ésta no se vea sometida a vaivenes de tipo político. Baena insistió en el aspecto de trabajar en el seno familiar y en la complicidad, que debe haber entre padres y profesores.
Para Abundi Alba, hay que apostar por “humanizar” la educación. Considera que gran parte de los esfuerzos deben centrarse en dotar a los alumnos de capacidad para querer aprender y no tanto en la acumulación de datos. En línea con Abundi, Antonio José Gómez también entiende que, a veces, los jóvenes “queman etapas demasiado rápido”.
