Así como la obra de teatro y el popular refrán dictan, es como se puede definir el periodo de más de ocho meses y medio, camino del año y cuarta parte del mandato, que llevan transcurridos desde que tomara posesión ésta Corporación Municipal. Ocho meses y medio perdidos para un pueblo, ocho meses y medio que han pasado desde la entronización de Antonio Ruiz como flamante y todo poderoso Presidente de Diputación, presidencia, más esperada por algunos que el segundo advenimiento de Jesucristo, y que muchos creían iba a suponer la resolución de todos los problemas del pueblo de Rute con inversiones y proyectos que irían brotando como por arte de magia como el maná para los israelitas en el desierto. Ocho meses y medio de “gestión”, fotos en el periódico y minutos en Canal Sur, en los que el resumen perfecto es mucho ruido y pocas nueces.
Cuando allá por finales de Junio nuestro alcalde tomara posesión de su otro cargo, eran muchas las voces que decían aquello de… “Ahora que Antonio Ruiz es Presidente de Diputación, sí que se van a hacer cosas en Rute”. Nada más lejos de la realidad. Aquí lo único que prospera es la imparable carrera política de nuestro señor Alcalde, cuya ambición personal no hace sino lastrar el desarrollo de un pueblo que va a la deriva, y cuyo máximo dirigente no tiene ni tiempo ni interés en gobernar, y delega la “gestión” de nuestro municipio en personas que están más pendientes de conseguir una “pensión digna” de cara a su jubilación, que en solucionar y resolver problemas. Conforme va pasando el tiempo, descubrimos que el trabajo que la institución provincial realiza en Rute, para nada difiere del que realiza en cualquier otro pueblo de la provincia, a excepción de algunos proyectos todos iniciados o planificados durante la anterior etapa de gobierno del Partido Popular en la Diputación. En el resto de actividades y proyectos, nos encontramos con la paradoja de que están condicionadas o perjudicadas incluso por la falta de interés por parte de los concejales del equipo de gobierno, que lejos de presentar proyectos e ideas para el desarrollo de nuestro pueblo, se limitan a dejar que el tiempo pase y que nuestro pueblo funcione a base de improvisación y por pura inercia y por el trabajo que realizan los empleados municipales. Sólo hay que comprobar las actas de Juntas de Gobierno, Juntas de Delegados, Plenos, o comisiones informativas, no convocadas en más de una y de dos ocasiones por ausencia de puntos a tratar, para certificar dicha falta de actividad.
En otro orden de cosas, como muchos sabéis, durante éste mes, el Partido Popular Andaluz, está llevando a cabo una campaña de recogida de firmas para la eliminación del impuesto de sucesiones y donaciones en Andalucía. Un impuesto injusto y que genera una gran desigualdad entre andaluces y habitantes de otras comunidades autónomas, obligándonos a tributar doblemente por cosas que nuestros familiares han estado trabajando para ganar durante toda su vida, y a lo que muchos andaluces se ven obligados a renunciar por no poder hacer frente a los gastos derivados de una herencia. Cualquiera que quiera sumarse a ésta campaña, no tiene más que ponerse en contacto con los miembros del partido, o sumarse en los impresos que han sido repartidos en algunos establecimientos de nuestro municipio.
En última instancia, desear a todos una feliz Semana Mayor, en la que esperemos que el tiempo acompañe y podamos disfrutar del trabajo de nuestras Cofradías.
