José Macías y Manuel Muñoz han leído ante los medios la declaración conjunta suscrita por sus dos formaciones
Las formaciones de PSOE e IU, junto a otros grupos y representantes políticos, han mostrado en todo el país su rechazo la Ley de la Reforma Local que entrará en vigor el 1 de enero de 2014. Consideran que atenta contra la autonomía local de las entidades con menor número de habitantes y encierra una “privatización” de servicios públicos. Afirman que estos servicios pasarán a ser más costosos y de menor calidad. Según la declaración conjunta que apoyan los grupos de PSOE e IU en Rute, el Gobierno presenta este texto basándose en el argumento de la carga financiera y económica que las corporaciones locales significan para la economía del país.
Se trata de una afirmación “sin fundamento”. De hecho, el endeudamiento público de las entidades locales está en torno al 4% del PIB, mientras que su déficit conjunto público total alcanzó en 2012 el 0,3% y será del 0% para el periodo 2013-2015. Pero además son las administraciones locales las únicas que están disminuyendo su nivel de endeudamiento, de tal modo que en 2012 más de tres mil ayuntamientos tuvieron superávit en sus liquidaciones presupuestarias. José Macías, en representación de IU, aboga por una Ley de Financiación Local, y no por una reforma que atenta “contra los ciudadanos y contra la administración más cercana”. Según Macías, “el gran problema” no es que los ayuntamientos presten esos servicios de proximidad, sino que no cuentan con la financiación necesaria para ello.
Por su parte, Manuel Muñoz, en representación de PSOE, considera que los vecinos no van a entender que servicios como los que se prestan desde el pabellón municipal de deportes o la Escuela de Música, pasen a ser gestionados por la Diputación provincial, o por una empresa privada, con el incremento de costes que supone para los ciudadanos. Para Muñoz, el Ayuntamiento debería ser la administración más cuidada, y está ocurriendo al contrario, que se está convirtiendo en la más desprotegida. Aun así, al tratarse de la administración más cercana, los ciudadanos mirarán a los ayuntamientos para preguntar estas cuestiones que no entienden. Porque está convencido de que a nadie le cabe que se encarezcan los servicios siendo de peor calidad.
El concejal socialista coincide con José Macías en que esta reforma debería haberse hecho al revés, es decir, dotando a los ayuntamientos de los recursos necesarios para atender los servicios que prestan. Por eso, no le extraña que las intenciones del Gobierno de Mariano Rajoy siembren dudas incluso entre muchos concejales del Partido Popular en municipios de todo el país.
