Carmen Henares (derecha) remontó los dos primeros sets a la tarifeña Nerea García para adjudicarse la final individual alevín por 3-2
El deporte ha cerrado el año en Rute con una cita de altos vuelos. Durante cuatro días, del 26 al 29 de diciembre, nuestro pueblo ha sido la sede de los Campeonatos de Andalucía de Tenis de Mesa. Las dieciséis mesas que ocupaban toda la pista central del Pabellón Gregorio Piedra dan una idea de la envergadura del evento. En las tres primeras jornadas, hubo partidos a razón de unas doce horas diarias, y en las del domingo 29 las últimas finales se prolongaron hasta después de la sobremesa. Ha sido la única forma de dar cabida a los 479 que han pasado por Rute, desde la categoría benjamín hasta la de veteranos 50. Llegada la hora de hacer balance, la valoración es positiva para todas las partes implicadas y en todos los sentidos. A los casi quinientos jugadores, hay que sumar que han venido acompañados de familiares. Se calcula que unas mil quinientas personas han estado en estos cuatro días en Rute, con la inversión que supone para hoteles, bares y restaurantes. El alcalde Antonio Ruiz ironizaba comentando que es “un efecto secundario muy positivo”. Más en serio, resaltaba el mérito de un pueblo como Rute de haber organizado “un evento deportivo de primer orden con tanto éxito”. Ha sido el fruto de un trabajo conjunto de la Federación Andaluza, el Club Tenis de Mesa Rute y el propio Ayuntamiento.
Valga como ejemplo de las visitas la anécdota que contaba Antonio Espejo, presidente del Club Tenis de Mesa Rute. En la primera jornada hubo restaurantes que se quedaron sin comida. Además, al estar en plena campaña navideña, los hoteles han estado copados. Según apuntaba el presidente de la Federación Andaluza, Rafael Rivero, hubo quien optó por volver a casa por la noche. La razón de tan amplia participación, como también explicó Rivero, en la presentación del torneo, hay que buscarla en la ubicación geográfica de Rute. En pleno centro de Andalucía, representa una distancia asequible para todos los jugadores, vengan de donde vengan. Ese aumento en la cantidad ha venido acompañado de calidad. El presidente andaluz espera que sirva como atractivo para fomentar la práctica de este deporte en Rute. De hecho, las gradas han estado llenas en estos días. Con todo, esa afición, que ya de por sí existía en nuestro pueblo, ha ido creciendo en el último año. Como recordaba el concejal de Deportes, Manuel Sánchez, desde que el club inauguró las remodeladas instalaciones en el local cedido por el Ayuntamiento, no ha parado el goteo de nuevos socios.
A lo largo de todo el torneo Rivero y Espejo coinciden en que se ha visto un tenis de mesa de altísimo nivel, con partidos muy disputados. Pero hasta en este punto la organización ha estado brillante. Tal y como analizaba el presidente de la Federación Andaluza, los buenos jugadores están en todas las finales. Así ocurrió en categoría individual absoluta. La final por equipos enfrentó a Cajasur Priego, con Alejandro Calvo y el oriental Shi We Dong, y a los sevillanos del Híspalis. Uno de sus jugadores, José Manuel Gómez, se había clasificado, junto a Calvo, para la final individual. Por tanto, nada más terminar la cita por equipos, ambos se enfrentaron en solitario. Gómez, considerado el mejor jugador defensivo de Andalucía, se sacaría la espina de la victoria prieguense por equipos, al ganar a Calvo por 3-0.
Es sólo una muestra de los muchos torneos que encierra este campeonato. Además, la filosofía de todos los clubes es que, sobre todo en categorías inferiores, los chicos y chicas jueguen el máximo número de partidos. De esta forma, compiten en su propia categoría y en las otras de mayor edad. Se hace difícil enumerar el palmarés de cada participante, aunque lo cierto es que tantos trofeos y tantas clasificaciones simultáneas permiten satisfacer a todo el mundo. Así, si el CTM Ciudad de Granada puede presumir de haber sido el más laureado, con veintisiete medallas, al CTM Linares le cabe el honor de ser el que más títulos ha logrado, con nueve primeros puestos.
Ambos clubes, así como Cajasur, han contado con presencia local. En Linares está una chica oriunda de Rute (su familia es de aquí), como es Almudena Roldán. También con el club jienense ha competido Carmen Henares, mientras que su hermana Belén lo hacía con Priego. Por su parte, Lydia Arcos lo hacía representando a la escuadra granadina. Lo importante es que las tres han vuelto a brillar con luz propia. Mención especial merece Carmen Henares. En categoría alevín, la que le corresponde por edad, ha quedado campeona en individual y por equipos, y tercera en dobles. De todos sus encuentros, el más vibrante sin duda fue la final individual alevín. La ruteña remontó un 0-2 en contra a la tarifeña Nerea García, para acabar imponiéndose por 3-2. Por su parte, Belén se ha proclamado campeona por equipos en categoría juvenil y absoluta. En esa categoría, la absoluta, pero en la competición individual, Lydia quedó segunda.
Es sólo parte de un palmarés extenso, dada la mencionada simultaneidad de torneos. Las propias jugadoras reconocían que, con tanto partido, a veces cuesta tener presente qué categoría se está disputando en un momento concreto. Respecto al hecho de estar en Rute, aseguran que no ha condicionado especialmente su juego, al margen de la ventaja que supone dormir de noche en casa. Pero en líneas generales, como subrayaba Antonio Espejo, el papel de los jugadores locales ha sido digno de elogio, cada cual según sus posibilidades y lo que podía dar de sí. Él mismo ha hecho dos podios en veteranos, uno en individual y otro por equipos, con José María Henares. Tampoco se puede pasar por alto el debut en una cita de este calibre del equipo de niños. Este año han dado el salto a la competición federada y para chicos como Manuel García (hijo) y Marcos Mangas, el torneo supone una buena piedra de toque para el futuro.
