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Las trabajadoras y el sindicato CTA también revelan que Atende, adjudicataria del servicio en Rute, ha abierto expedientes por coger días de permiso
Las empleadas del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) en Rute han vuelto a manifestarse para reclamar una mejora de sus condiciones de trabajo. Así, el pasado sábado 6 de abril convocaron una manifestación respaldada por el sindicato CTA. La marcha partió del Paseo del Fresno y concluyó ante el Ayuntamiento. Entre sus reivindicaciones, la más reciente es que la empresa Atende, actual adjudicataria del servicio en Rute, aún no ha aplicado la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Según explicó una de las auxiliares, Dolores Serrano, dicha subida está aprobada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 6 de febrero. Sin embargo, la empresa ha comunicado que no será aplicada hasta diciembre.
- Trabajadoras y sindicato coinciden en que la solución es municipalizar el servicio, ya que es de carácter público, pero se canaliza con gestión indirecta
No es el único “incumplimiento” que denuncian. Serrano criticó la “mala gestión” de la oficina de Rute, que genera descontento “en usuarios y trabajadores”. Además, lamenta que ellas lo paguen con sanciones “injustificadas” y suspensiones de empleo y sueldo. A ello se suma la negación de días de asuntos propios, abusos y “engaños” en el pago de la gasolina para el desplazamiento. También se queja de que a menudo son llamadas para hacer sustituciones “cinco minutos antes, incumpliendo la desconexión digital”. De igual modo, las empleadas no están conformes con que las horas extra se compensen con días de descanso “cuando a la empresa le viene bien”.
Su compañera Raquel Molina apeló directamente al alcalde David Ruiz para que tome cartas en el asunto, ya que el SAD es de carácter público, por más que se canalice con gestión indirecta. Como recordó, en Rute hay 135 personas trabajando en la ayuda a domicilio y entiende que no pueden ser cada cierto tiempo “subastadas como ganado a empresas con ánimo de lucro”. De hecho, trabajadoras y sindicato coinciden en que la solución pasa por “municipalizar el servicio”.
En la misma línea, Francisco Moro, secretario general de CTA Andalucía, matizó que Atende está integrada en la anterior adjudicataria, Clece, propiedad de Florentino Pérez. Moro no entiende que las trabajadoras coticen sobre el SMI y no se les pague la subida. Tampoco se reconocen las licencias retribuidas, es decir, el nuevo permiso de cinco días laborables que recoge el Estatuto de los Trabajadores por enfermedad u hospitalización de un familiar. El sindicalista cree que si un servicio “de primera necesidad” es beneficioso para una empresa también puede serlo para un ayuntamiento. De ahí que inste a que lo gestione “la propia entidad local o una empresa pública”.