La suelta de la vaquilla y la procesión de la Virgen de Gracia centran las fiestas de Zambra

Tanto la vaquilla como la procesión contaron con gran afluencia de público

Tanto la vaquilla como la procesión contaron con gran afluencia de público

Durante el primer fin de semana de octubre, el centro de atención de Rute se ha trasladado hasta la aldea de Zambra. Allí se han celebrado las fiestas en honor a la Virgen de Gracia. Unas fiestas que tuvieron su lado más lúdico en la tarde con la tradicional suelta de vaquillas, una cita que cada vez congrega a más público, no sólo de Rute sino de muchos pueblos de alrededor. Esta vez, las reses han dado más juego que otros años y durante buena parte de la suelta los más intrépidos que se hallaban dentro de la valla de seguridad tuvieron que emplearse a fondo y correr de lo lindo para escapar de los pitones. A la suelta de vaquillas siguió el vuelo de dos pavos y ya por la noche se celebró un concierto por todo lo alto a cargo del dúo de sevillanas “Las Carlotas”.

El momento más emotivo llegó el domingo por la noche, con la salida en procesión de la imagen titular. Hasta tres bandas de música, la Municipal de Rute, la Agrupación Musical Los Dolores, de Carcabuey, y Banda del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga, acompañaron a una comitiva que este año ha contado con la ex teniente de alcalde del Ayuntamiento de Rute, Josefina Martín, como reina de las fiestas. Ante la falta de voluntarias, la presidenta de la cofradía, María Cárdenas, quiso agradecer a Martín que aceptara la propuesta, “porque ha querido colaborar así, a la espera de que el año que viene otras chicas se animen”.

Aunque la afluencia fuera algo menor que con “La Vaquilla”, muchos fueron los devotos que se acercaron hasta la aldea ruteña para acompañar el trayecto de Nuestra Señora de Gracia, entre ellos representantes de cofradías como la de Benamejí o El Nacimiento. Por eso, a pesar de que la cofradía cuenta con pocos miembros, para Cárdenas el gran esfuerzo de los días previos se veía recompensado porque todo había salido “a pedir de boca”.

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