La Cabalgata contó con una presencia de público más numerosa aún de lo habitual
Sólo había una cosa segura. Los Reyes Magos irían a visitar a los ancianos de la Residencia Juan Crisóstomo Mangas. Así lo había adelantado el concejal de Festejos, José Arcos, porque ése es probablemente el momento más entrañable de este día de la ilusión. La Cabalgata, en cambio, iba a estar en el aire hasta última hora, habida cuenta de que las posibilidades de precipitaciones eran considerables. De hecho, en Rute había estado lloviendo durante casi toda la jornada del 5 de enero. Sin embargo, el último chubasco cayó sobre las seis de la tarde y una hora después todo estuvo a punto para que la comitiva pudiera recorrer las calles céntricas de Rute entre un público más numeroso aún de lo habitual. Tal vez la misma incertidumbre que había generado el tiempo hizo que la multitud se volcara para disfrutar en vivo de esos momentos tan ilusionantes, sobre todo para los más pequeños.
Seguro que también influyó la amplia presencia de carrozas, con un total de dieciséis. De ellas, seis corrían por cuenta del Ayuntamiento, mientras que el resto eran de asociaciones, colectivos y particulares. Entre éstas, había de todo: clásicas como las de las cofradías o las AMPAS de Los Pinos y La Ronda, y otras que se estrenaban en el desfile, como la de Jesús Resucitado o la elaborada por el Rute Calidad. Liderada por el Frente Des-madres, habían recreado a escala el campo del Polideportivo Municipal, rebautizado como el “Pulmonía Arena”.
Para ambientar la comitiva, se contó como de costumbre con la Banda Municipal. Y cómo no, desde las carrozas se repartieron juguetes y caramelos, muchos caramelos. Hasta tres mil kilos, de los que los menores (y otros no tanto) hicieron buen acopio, valiéndose de bolsas paraguas puestos del revés y lo que hiciera falta. En suma, una noche festiva y con todos los ingredientes para que Arcos considerara que Rute había contado con una Cabalgata “muy digna”; una Cabalgata que, ya en la tarde del 6 de enero, también recorrería las aldeas ruteñas.
Ante tanta multitud, siempre es necesario tomar ciertas precauciones. En este sentido, junto a los servicios municipales de seguridad, cabe destacar la implicación de los miembros de Protección Civil. El concejal responsable de esta área, Juan José Roldán, quiso agradecer públicamente el compromiso de estos voluntarios. De los once que conforman actualmente el servicio, nueve estaban colaborando en la Cabalgata.
Por otra parte, como viene siendo habitual, en la tarde-noche de Reyes se dio a conocer el fallo del concurso de escaparates y comercios, convocado por la concejalía de Festejos para realzar el aspecto más comercial de estas fiestas. En esta ocasión, el establecimiento premiado ha sido Granados Decoración. El concejal José Arcos destacó el mimo que suele poner este negocio en su escaparate (ya ganó en otra ocasión) ante un concurso que precisamente quiere ser “un acicate” para los comerciantes.
