La verbena se dio por concluida en la madrugada del sábado y todo apunta a que el robo fue a partir del domingo por la noche
Entre finales de junio y principios de julio, la hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y la Soledad de Nuestra Señora celebraba su tradicional verbena de San Pedro. Las cosas se han acabado torciendo en esta cita ya habitual del verano en Rute. La cofradía ha sido víctima de un robo. Durante los días posteriores, su presidente, Juan Arrebola, quiso pensar que podía tratarse de alguna broma, por desagradable y pesada que resultara. No sería la primera vez que los miembros de la junta de Gobierno sufren una jugarreta similar. Pero, después de más de dos semanas, hasta esa opción ya va quedando descartada. Los hechos se produjeron en el último día de verbena, es decir, el primer domingo de julio. En realidad, se había dado por concluida en la madrugada del sábado. Después de que la Selección se clasificara para la final de la Eurocopa de fútbol, la junta de Gobierno decidió suprimir la celebración del domingo. Como ha recordado el presidente, “en vista de que el Ayuntamiento de Rute había optado por instalar una pantalla en el teatro al aire libre, acompañada de una barra”, pensaron que todo el mundo se iría a ver el fútbol.
Además, Arrebola confiesa que, de cara a la mañana, ya venían “escarmentados” de otros años, donde han comprobado que la venta “es nula”. Con el calor, la gente se va a la piscina o incluso a la playa o fuera de Rute. El caso es que no se acude a la verbena en horario matinal. Por tanto, en la madrugada del sábado se procedió a desmontar, terminaron hacia las seis y durante la jornada del domingo varios miembros de la cofradía se fueron turnando para supervisar las sillas, las mesas, los mostradores y los enfriadores o “botelleros”. Las sillas y las mesas fueron retiradas con total normalidad. Sin embargo, cuando el lunes, 2 de julio, por la mañana los responsables de Exclusivas Mangas Roldán procedieron a retirar los “botelleros” comprobaron que faltaba uno. Así pues, el robo se habría producido a partir de la tarde-noche del domingo, “tal vez aprovechando la euforia de la celebración del fútbol”.
