Vicente Pedraza durante su nombramiento como Hijo Predilecto de Rute
Rute ha perdido a un Hijo Predilecto, en sentido literal. El impresionante currículum que atesoraba Vicente Pedraza Muriel como referente en el mundo de la Medicina había hecho que el Ayuntamiento de Rute le otorgara tal distinción en abril de 2008. Su fallecimiento, tras una larga enfermedad, se conocía justo antes del comienzo del pleno extraordinario convocado para la tarde del 25 de febrero. De inmediato, la Corporación tomó la decisión de guardar un minuto de silencio, además de decretarse desde la Alcaldía dos días de luto en el Ayuntamiento de Rute, con las banderas ondeando a media asta.
Pedraza obtuvo el título de licenciado en Medicina por la Universidad de Granada y el de Doctor en Medicina por la Universidad Complutense de Madrid. Desde esa posición, dirigió numerosas tesis doctorales y sus publicaciones son incontables. Le cabe el honor de haber logrado el mejor expediente académico de la Facultad de Medicina de Granada. Ello le llevó a ser responsable del departamento de Radiología y Medicina Física de esta Universidad. Por citar sólo algunos de sus premios, entre ellos están el Nacional de Investigación de la Junta de Energía Nuclear, el Nacional de Investigación de la Asociación Española Contra el Cáncer, el de la Mejor Comunicación Científica en Chicago o la Medalla de Oro de la Asociación Española de Radioterapia y Oncología de Las Palmas de Gran Canaria. Su currículum siguió incrementándose hasta última hora. Tras el nombramiento como Hijo Predilecto de Rute, en noviembre de 2009 fue elegido miembro de la Real Academia Nacional de Medicina.
Tenía el mérito añadido de haber escalado tan alto procediendo de unos orígenes tan humildes. Nunca renegó de esos orígenes y siempre hizo gala del esfuerzo que había hecho su familia para que él pudiera estudiar. En una entrevista concedida a Radio Rute, en vísperas del nombramiento como Hijo Predilecto, se emocionó recordando esos tiempos. Y a pesar de su apabullante trayectoria, aseguró que el hecho de que su pueblo lo reconociera de esta forma era algo “muy emotivo”. Aunque vivía en Granada, tenía claro cuáles eran sus raíces. A Rute volvía ocasionalmente y en Rute conservaba algunos buenos amigos. Por eso, cuando alguno reclamaba su presencia, allí estaba Vicente Pedraza. De ello da fe Bartolomé Sánchez, que contó con su amigo en la presentación de su libro “La hipocondría y otros relatos”.
Ahora ha vuelto a su pueblo natal de forma definitiva. Sus restos descansarán en el cementerio de San Cristóbal tras el funeral celebrado en la intimidad familiar. La Medicina ha perdido a uno de sus investigadores y docentes más destacados. Y Rute ha perdido a uno de sus paisanos más ilustres.
