Imagen de una vista oral publicada en el portal Que.es
El jurado popular ha declarado por unanimidad culpable de asesinato al joven que en la noche del 12 de septiembre de 2006 disparó a su exnovia de 16 años en Rute. Los disparos le provocaron unas lesiones que acabaron con su vida tres años más tarde. De este modo, el tribunal popular ha considerado probado no solo los hechos por los que estaba acusado. También ha hallado un nexo entre las lesiones y las secuelas de los disparos que recibió la joven y su fallecimiento tres años más tarde. El jurado sostiene que la muerte de Carmen Romero “sólo puede achacarse a los disparos y heridas provocadas por M.G.R.”. De esta forma, desmonta la tesis de la defensa del principal acusado. Durante el juicio la defensa siempre argumentó que su cliente debía haber sido juzgado por un delito de lesiones y no de asesinato. En su opinión, no quedó demostrada esa causalidad que el jurado sí ha aprobado por unanimidad.
Por otra parte, el jurado también ha considerado culpable al amigo del principal acusado, en este caso como cooperador necesario para la comisión del delito de asesinato. Entiende que le facilitó el arma homicida “a sabiendas del uso que iba darle”.Además, en el veredicto se recoge que ninguno de los enjuiciados sufrió trastorno mental transitorio ni estaban afectados por anomalías físicas.
Tras la lectura de la decisión del jurado, las acusaciones particulares, que representan al padre y la madre de la víctima, han mantenido sus peticiones y solicitan 20 años por el asesinato al exnovio de la fallecida y 15 para el amigo. Por su parte, tanto la Fiscalía como el Abogado del Estado han modificado su petición de pena para el principal imputado y la han rebajado de los 20 años que solicitaban al principio a 18. Esta rebaja se debe a que el jurado ha considerado probado el arrepentimiento, ya que el acusado avisó a la Guardia Civil del lugar en el que se encontraba.
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