En esta segunda edición del torneo, han participado doce equipos, cuatro más que el año pasado
Por segundo año consecutivo, el grupo joven de la cofradía de la Borriquita ha organizado un torneo de fútbol 7. Según explica su presidente, Jesús Écija, se han inscrito un total de doce equipos, tres de categoría alevín y el resto cadetes. Cada uno de estos equipos aportaba una cuota de inscripción de 20 euros. La idea es que con la recaudación se puedan costear distintas actividades que pone en marcha el grupo joven. Écija asegura que tienen “mucha ilusión y muchas ganas de trabajar”. La acogida del torneo ha sido mejor incluso que en la primera edición, ya que ha habido cuatro equipos más. Ello ha sido posible aprovechando las vacaciones navideñas y porque antes los responsables del grupo estuvieron distribuyendo carteles en todos los centros educativos de Rute. De hecho, además de escolares del municipio, se han sumado de otras localidades cercanas como Cuevas de San Marcos o Benamejí.
Al haber más grupos en la categoría cadete, ha habido que disputar una fase previa con dos grupos, antes de pasar a las eliminatorias. Entre los alevines, ha habido una liguilla triangular y los dos primeros jugaban la final. Lógicamente, el resultado del torneo queda en segundo plano. Lo importante, como apunta el presidente de la cofradía, José Manuel Molina, es “fomentar la deportividad y la convivencia entre los niños”. A la vez, se pretende que tengan algún tipo de actividad deportiva en vacaciones.
Respecto a la evolución del grupo joven, Molina está muy satisfecho. Comenzó con ocho integrantes y ya han duplicado la cifra. De hecho, son más que los integrantes de la junta de Gobierno de la cofradía. No lo ve como una mala señal, ya que, haciendo un paralelismo deportivo, el grupo sería “la cantera” de la cofradía. Por ello, al tener unos intereses comunes, todas las actividades están coordinadas. José Manuel Molina ha destacado que, fruto de ese trabajo, los muchachos han sacado fondos para regalar la nueva túnica del Cristo de la Borriquita. Además, compaginan iniciativas como ésta con otras plenamente solidarias, como la del cartero real, programada para el 27 de diciembre. En su caso, junto a la carta de los Reyes Magos, los niños entregan a este cartero alimentos no perecederos para la delegación de Cáritas en Rute.
