Un momento de la salida de la virgen del Consuelo
El último fin de semana del mes de agosto ha estado marcado, un año más, por la salida procesional del la virgen del Consuelo, unas fiestas que se celebran cada año en las huertas de la Hoz. El origen de la devoción en Rute a la imagen de la virgen del Consuelo se remonta al siglo XIX cuando Julián Tejero Tenllado trajo de Sevilla un lienzo con la imagen de esta advocación para que presidiese la ermita que él mismo había rehabilitado en la dehesa llamada el Pamplinar. Más tarde la construcción del pantano de Iznájar en 1962 obligó a buscar una nueva ermita, fue entonces cuando se apostó por la zona de las huertas del la Hoz. En concreto las fiestas en honor a la virgen del Consuelo se han llevado a cabo del 30 de agosto al 2 de septiembre; siendo el día 1 el más intenso: comenzó con la recogida de regalos para la mesa a las 10.00 de la mañana y continúo con la carrera de cintas a las cuatro de la tarde y la salida procesional de Nuestra Señora del Consuelo, desde su ermita, a las 9.00 de la noche. La virgen estuvo acompañada por los representantes del Clero y autoridades, además de las señoras y señoritas ataviadas con mantillas y al estilo andaluz. La subasta de regalos tuvo lugar a partir de la medianoche tras la quema de fuegos artificiales. La noche estuvo amenizada por la actuación de la orquesta local Trópica de Cáncer. Se trata de unas fiestas muy familiares y en las que participan todos los vecinos de la zona. El presidente de la cofradía y Hermano Mayor de este año, Juan José Tejero afirma que “las vive desde pequeño” y que la devoción a esta virgen y la participación en las fiestas que se realizan en su honor es “una tradición familiar” que le honra continuar.
