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Durante una semana se han sucedido los actos religiosos y lúdicos, que han culminado con la procesión de la patrona de la aldea y la popular suelta de vaquillas
Un año más, el mundo cofrade de Rute ha vuelto la vista a la aldea de Zambra durante el primer fin de semana de octubre. Allí se han celebrado las fiestas en honor a Nuestra Señora de Gracia. En realidad, el programa había empezado el domingo anterior, el 29 de septiembre, y había dejado pinceladas en los días siguientes. Con todo, el grueso de cultos y actos se ha concentrado del viernes 4 al domingo 6. Como lugares de celebración han alternado la parroquia a la que da nombre la patrona de la aldea y sus inmediaciones, y el recinto ferial y la zona del Prado, en la parte baja de Zambra.
- Las fiestas de este año han tenido un componente familiar, tanto en la pregonera y los hermanos mayores como en las reinas infantil y juvenil
El pistoletazo de salida se había dado el día 29, con la ofrenda de flores y la posterior misa. El miércoles 2 comenzó el triduo, que en la jornada del jueves 3 incluyó la presentación a la Virgen de los niños y niñas nacidos en la aldea en el último año. Al término del último día de triduo, llegó uno de los momentos destacados, el pregón, que dio paso al besamanos. La pregonera de esta edición ha sido Ana Ramírez Hinojosa, una joven muy vinculada a estas fiestas, por su ascendencia familiar. No en vano, su hermano Antonio es el presidente de la cofradía y sus padres, Antonio y Ana, han sido los hermanos mayores este año.
Terminado el pregón, la comitiva se trasladó al recinto ferial para proceder a la apertura de la mesa de regalos, la coronación de las reinas infantil y juvenil, y la imposición de bandas a sus respectivas damas de honor. La reina juvenil de 2024 ha sido Virginia Castro y, siguiendo con ese carácter familiar de esta edición, la infantil ha sido su hermana Ainara. La primera ha contado con Andrea Molina y Sonia Porras, mientras que a su hermana pequeña la ha acompañado María Pedrazas. Durante el resto de la noche, se pudo disfrutar en el recinto con la animación de la música en vivo y un DJ.
El sábado alternaron de nuevo la iglesia, con la solemne función religiosa de la mañana, y el recinto, donde se sucedieron un espectáculo de animación infantil, la subasta de regalos y una paella popular. A las ocho llegó el momento central de estas fiestas, la procesión de la Virgen de Gracia. El cortejo contó con el acompañamiento de la Agrupación Musical Santo Ángel Custodio y recorrió las dos partes de la aldea. El itinerario deparó momentos vistosos, como los fuegos artificiales en el Prado, o emotivos, como la entrada de la Virgen en su templo. Después, la animación continuaría en el recinto hasta bien entrada la madrugada.
Para el domingo quedaba el colofón más lúdico. Definitivamente, se ha asentado el cambio de adelantar la procesión al sábado y aprovechar que el día siguiente no es laborable. Los eventos del domingo se desarrollaron en la calle Duque, junto a la iglesia. La jornada arrancó a mediodía, con la fiesta de la cerveza y perritos calientes, a beneficio de la cofradía. En la sobremesa se celebró la tradicional suelta de vaquillas, que, como el resto del programa congrega a numeroso público del resto de Rute y la comarca. A su término, el grupo Trueno Azul y un DJ pusieron la guinda a unas fiestas que de nuevo han aunado lo religioso y lo lúdico, en un ambiente de gran convivencia.
