Volviendo a la normalidad

Han sido largos años de travesía en el desierto, de duros recortes y de sinsabores que tuvimos que gestionar en momentos difíciles, pero que debido a la situación tan complicada y a la grave crisis económica que sacudió a nuestro país, no quedaba más remedio que asumir, pese a considerar que quizá otras medidas hubiesen resuelto mejor la situación sin cargar el peso de la recuperación económica a espaldas de las familias y los menos favorecidos. Reformas en la ley de financiación local, impuestos progresivos y a las grandes fortunas y empresas que a través de las SICAV se ahorran muchos millones de euros en impuestos, probablemente no hubiesen solucionado de un sablazo la situación, pero sí que habrían permitido mitigar las severas medidas que los Ayuntamientos tuvimos que implementar por imperativo legal. Ahora resulta que la administración local ha sido la única que ha cumplido con sus obligaciones, que la deuda pública local ha bajado y que hemos demostrado que sí, que nos abrochamos el cinturón y comulgamos con ruedas de molino, teniendo que decir no a muchos ciudadanos que veían cómo desde su Ayuntamiento no se les podía prestar la atención adecuada, no porque no quisiéramos, sino porque nos lo impedían desde el Gobierno de España. Y mientras tanto, desde el Gobierno Central y de las Comunidades Autónomas, no sólo no han cumplido el objetivo, sino que se han endeudado más, poniendo la cifra de deuda pública en nuevas cotas de récord.

En el Ayuntamiento de Rute se adoptaron medidas estrictas en materia de personal, con reducciones horarias importantes, y despidos que no podrán volver a retomar su puesto de trabajo. Hoy sólo nos queda agradecer a quienes desde su silencio y paciencia han soportado esta situación con la confianza de que más pronto que tarde se volvería a la normalidad. Gracias al esfuerzo en la contención del gasto y al cumplimiento del Plan de Ajuste hemos podido adelantar 4 años la reversión de estas medidas en materia de personal. Algo que no ha sido fácil, pero que considerábamos más que necesario para resarcir del daño causado a quienes, pese a todo, siguieron trabajando duro para que el Ayuntamiento siguiese adelante sin perjudicar los servicios que debían prestarse a los ciudadanos. Queremos darles las gracias desde aquí, por su labor, por su paciencia y por su confianza. Y también queremos decir que seguiremos trabajando el corto año de mandato que aún resta hasta las próximas elecciones municipales para garantizar que nuestro Ayuntamiento cumple con sus obligaciones, pone fin a proyectos que nuestros vecinos demandan en el día a día y mejora los servicios y prestaciones que las ruteñas y los ruteños necesitan. Nuestro compromiso en 2015 no era otro que el de dar respuestas, formar parte de la solución y arrimar el hombro para trabajar y poner a Rute en el lugar que merece. Aún queda un año, y entendemos que estos 3 años han servido para demostrar que sí, que hicimos bien y tomamos las decisiones correctas, aunque controvertidas para algunos, y que aunque algunos aún sigan sin comprenderlo y criticándonos, Rute ha visto sobradamente que nuestro trabajo ha sido de provecho para todos. El tiempo da y quita razones, y en nuestro caso estamos orgullosos de haber formado en estos años parte de un gobierno progresista que ha sabido atender las obligaciones fiscales y seguir prestando colaboración y apoyo a todos sus colectivos. Y queremos dar las gracias a quienes sí confiaron en el proyecto que desde IU Rute pusimos en marcha.

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