Durante éste día 28 de febrero, como viene siendo tradición desde hace casi 30 años, se han entregado en nuestro pueblo los premios Villa de Rute. Unos premios, que año tras año, nos muestran el talento y el valor humano que hay en nuestro pueblo, y tras presenciar el acto de entrega, bien merece una reflexión y un reconocimiento añadido desde éstas líneas. Para cualquier ruteño que oiga a los premiados hablar, bien debe ser un motivo de orgullo ser contemporáneo y paisano de tamaño talento, además de un espejo en el que invitar a mirarse a las nuevas generaciones para marcarles un ejemplo a seguir con lucha, entrega, sacrificio y corazón. Es un orgullo para todos nosotros, el ver cómo desde un pequeño rincón del centro de ésta Andalucía, año tras año descubrimos tanto talento, que lejos de acabarse, cada año va a más y más y nos sorprende más que el anterior, y son fuente de inspiración y un motivo más para seguir luchando por dar lo mejor de nosotros mismos por nuestro pueblo y por nuestros vecinos. Trabajo, esfuerzo, entrega, dedicación, superación, amor por el trabajo bien hecho, son factores comunes que podemos encontrar en los galardonados de hoy, y que podemos encontrar en el corazón del buen ruteño y el buen andaluz, pues qué si no eso es lo que celebramos y reivindicamos en el 28 de febrero. En días tan tristes como los que vivimos en éstos días, con una guerra recién comenzada en nuestra Europa, conviene recordar y conocer la grandeza que hay en los más cercanos a nosotros, y nos ayuda a recordar que cualquier de nosotros, podemos marcar la diferencia, una pequeña diferencia que ayude a cambiar para mejor la sociedad en la que vivimos, y como bien decía una de las galardonadas si no recordamos mal, Rute es la brújula con la que guiarse y que nos ayuda a no perder el norte. Esos valores, son en los que creemos firmemente desde nuestro Grupo Municipal, y son los que que creemos que representa el proyecto de JuanMa Moreno, que ha demostrado cómo se pueden conseguir más y mejores cosas para Andalucía, desde el respeto y el amor por nuestra tierra, desde el respeto a todas las formas de pensar, con determinación, con firmeza, pero con humildad.
En otro orden de cosas, cuando se van a cumplir dos años desde el comienzo de la pandemia, queremos tener unas palabras de recuerdo para todos aquellos que nos han dejado en éstos meses. Cuando en aquel carnaval de 2020 oíamos hablar del covid, ninguno alcanzábamos a imaginar lo que podía desatarse y lo que nos quedaba por vivir. Ni el más aterrador de los guiones de ficción, podía imaginar cómo se acabaría imponiendo una atroz realidad que nos cambiaría como sociedad y pondría en jaque a toda la sociedad. Han sido dos años muy duros, con momentos muy complicados los que hemos afrontado tanto a nivel individual, como sociedad, pero en los que hemos demostrado que en lo peor, podemos unirnos y salir más fuertes, y es por eso, que debemos extraer esa enseñanza de ésta pandemia que esperemos que pronto veamos terminar, y sólo sea un recuerdo y algo para recordar y estudiar en los libros de historia.
¡DESTACAMOS!