La sanidad pública en Andalucía pide que la ayudemos a gritos. El clamor suena tan fuerte desde hace tanto tiempo, que parece que nos acostumbramos a esta situación. Pero no debe de ser así, debemos luchar y recuperar lo que tanto esfuerzo y tanto tiempo requirió conseguir por nuestros padres y abuelos.
Y es que los últimos datos publicados por la misma Junta de Andalucía, responsable de la gestión sanitaria en nuestro pueblo y provincia, son tremendos: 16151 personas en listas de espera para consultas externas en el hospital Infanta Margarita de Cabra, un 180% más en un año. En un año las listas de espera de la primera consulta se han incrementado un 180%, pasan de 8959 en 2023 a 16151 en 2024. Los datos, son escandalosos. Está claro que el desmantelamiento de la Sanidad Pública con este gobierno del Partido Popular es un atropello.
Los consultorios locales tienen el personal desbordado y falta de recambio para este mismo, que sufre en primera persona, no poder dar la asistencia de calidad que merece todo paciente. Así están las cosas. Moreno Bonilla, presidente de la Junta, se excusa en que esta situación es una situación que se arrastra desde hace años. Pero él lleva ya muchos años gobernando y esto no ha hecho más que empeorar, y de qué manera, señal esta de que la Sanidad Pública le importa bien poco, el dinero para la privada, que es lo que quiere hacer, que la gente no sea atendida, listas de espera eternas, personal desbordado y poco cuidado, urgencias colapsadas…Lo cierto es que el malestar ciudadano se incrementa por momentos. Nos queda mucha protesta todavía para que nos escuchen de verdad. Esto útimo también es cierto.
Y mientras la Sanidad Pública agoniza, la privada emerge con fuerza. El gasto en esta ha crecido más de un 60% desde que está el PP en el gobierno andaluz. Según la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública uno de cada cuatro andaluces ha tenido que contratar un seguro médico privado para tener una sanidad en condiciones. La salud es lo primero, sí, pero a costa del empobrecimiento de las familias de clase trabajadora. Los que no puedan contratar estos seguros ni siquiera pueden optar a un diagnóstico a tiempo que pueda salvarles la vida. Esto de lo que aquí se habla es muy serio. Menos postureo y verborrea y más sanidad de calidad para el ciudadano.
Esta es la realidad dramática y sin precedentes por la que atraviesa nuestra Sanidad Pública, unas listas de espera que aumentan, en menos de un año, un ciento ochenta por ciento, se dice pronto. Una que avanza cuesta abajo y sin frenos hacia el modelo sanitario privado del Partido Popular que ejecuta sin dilación allá donde gobierna. En estas estamos, pidiendo socorro sin recibir aún demasiada ayuda. Necesitamos muchísimas más protestas. Esto no es una cuestión política sino social, y si el pueblo no se une y se manifiesta en masa, nos dejarán sin nada. Eso es lo que necesita nuestra Andalucía para volver a ser lo que fuimos. Está escrito hasta en nuestro himno. No miremos más hacia otro lado, esto es por todos nosotros. Y por los que están por venir.
















