El Rute Calidad pierde por un penalti lanzado… ¡más de un mes y medio después de acabar el partido!

  • La pena máxima decretada contra los ruteños en Fuente Palmera fue anulada por el árbitro al pitar el final del encuentro, pero la reclamación hizo que el penalti se repitiera a los 46 días

El centrocampista “colono” Luismi transformó el penalti batiendo al ruteño Juan Moreno (Foto: Fuente Palmera Información)

Los jugadores del equipo senior del Rute Calidad C.F. han vivido su propia versión local de la película “El penalti más largo del mundo”. Visto con perspectiva, con esa filosofía humorística se tomarán con el tiempo una situación que admite calificativos como absurda, surrealista o kafkiana. Los hechos se remontan al pasado 2 de febrero. Ese día los ruteños jugaban en Fuente Palmera su partido correspondiente a la jornada 16 de la Tercera Andaluza. Con el encuentro ya en el descuento, un ataque del equipo “colono” se resolvió sin incidencias aparentes y todo apuntaba a que el choque quedaría así, con tablas, 2-2, en el marcador.

  • Después de pitar contra los ruteños un penalti que nadie entendió y de que se lanzara, el árbitro no dio por válido el gol, decretando el final del partido

En lugar de escucharse el pitido final, cuando se producía la contra ruteña, el juez de línea empezó a agitar el banderín para advertir al colegiado de algo. Tras acercarse a consultarle, el árbitro decretó penalti a favor del C.D. Colonia de Fuente Palmera. De por sí, la jugada generó confusión en los dos equipos, que no tenían claro qué se había sancionado. Sin embargo, estaba muy lejos del estupor general que se produciría después de que el jugador local Luismi transformara la pena máxima. El “trencilla” decretó que el gol no era válido porque daba por concluida la contienda.

El entrenador ruteño Francis Sánchez matiza que el colegiado, Rafael Valero Toledo, no dio en ningún momento el encuentro por suspendido, sino por “finalizado, con resultado de empate a dos”. Después, no fue capaz de dar ninguna explicación de lo que había ocurrido a los dos entrenadores. Tan sólo dejó que caer que se las daría “a quien tuviera que dárselas”.  A raíz de ello, y aunque el técnico local le había que se había equivocado “dos veces, una pitando el penalti y otra decretando el final sin dar validez al gol”, Fuente Palmera reclamó ante el Comité Técnico de Árbitros de la Federación de Córdoba. El comité resolvió abrir expediente al colegiado, dando de plazo hasta el 11 de febrero a los dos clubes para ponerse de acuerdo y que el penalti se repitiera.

A su vez, el Rute Calidad presentó una reclamación, al entender que el comité no había procedido en el tiempo y la forma adecuados. La razón es que la resolución salió, el jueves 6 de febrero, sin dar tiempo a que los ruteños pudieran alegar. Su argumento se basaba en que el capítulo 5 de las reglas de la Federación Internacional IFAF dejan claro que las decisiones del árbitro sobre los hechos de un partido, la validez de un gol o el resultado final son “irrevocables” a posteriori, tras acabar el encuentro.

Los ruteños presentaron las alegaciones directamente a la Federación Andaluza, lo que dilató el proceso. Cada club entendía que debía defender sus propios derechos, pero partiendo de la base de que los dos consideran un despropósito lo ocurrido y han sido perjudicados. La intención común era que se les tomara “en serio”. Por tal motivo, no hubo acuerdo para repetir el penalti antes del 11 de febrero.

La resolución final de la Federación Andaluza no llegaría hasta marzo. En una decisión un tanto salomónica, instó a la delegación cordobesa para comenzar de nuevo el procedimiento, respetando los plazos pertinentes para las alegaciones del club ruteño. El pasado día 20 por fin se lanzó la pena máxima, con los mismos protagonistas, el centrocampista “colono” Luismi y el guardameta ruteño Juan Moreno. Para ello, se contó con la supervisión de un delegado federativo, no así del “trencilla” Valero Toledo, del que los ruteños no han vuelto a tener noticias.

Luismi transformó de disparo raso con la zurda la pena máxima lanzada a la izquierda de Moreno, tras un breve calentamiento. Como muestra de que los dos clubes se han sentido víctimas de una situación “esperpéntica”, tras el lanzamiento ambos jugadores se fundieron en un abrazo, en un ambiente “de absoluta concordia”. Se ponía así fin a un partido que ha tardado nada menos que 46 días en resolverse. El tanto resta el punto del empate al Rute Calidad, que se mantenía en la clasificación, y da dos más al Colonia de Fuente Palmera, que adelanta ahora a los ruteños.

Los dos equipos se sitúan en la parte media-alta de la clasificación, con opciones todavía, aunque remotas, de ascenso. Francis Sánchez lleva toda su vida vinculado al fútbol amateur, primero como jugador en las diferentes categorías del Rute Calidad y después como entrenador. Asegura que nunca ha asistido a un episodio tan incomprensible como éste. Una vez concluido, confía en poder centrarse en el fútbol, y culminar una temporada muy positiva hasta la fecha. El equipo senior volvía a la competición tras varios años de parón, con el reto de asentarse en la categoría. Hasta ahora, el objetivo se está cumpliendo con creces.

Deja un comentario