Reinventando sabores

  • Gloria e Hijos y su Museo de la Chacina han renovado en los últimos años la receta tradicional de los embutidos ruteños añadiendo productos como el piñón o la pitaya

Nuevo salchichón de Gloria e Hijos condimentado con pitaya

El sector de las chacinas también forma parte de los productos gastronómicos identificativos de Rute. Por eso, las mesas no sólo se llenan en Navidad de los habituales turrones y mantecados, sino de embutidos como el salchichón. En Gloria e Hijos lo saben y, llegadas estas fechas, cada año buscan renovar su gama de producción que se puede degustar y adquirir en el Museo de la Chacina.

  • La pitaya que se ha añadido al salchichón es una fruta rica en vitaminas y minerales, además de recomendable por sus propiedades antioxidantes y nutricionales

Al mismo tiempo, este museo guarda un amplio muestrario de maquinaria antigua. Es una forma de comunicar al visitante que los tiempos avanzan pero la fórmula de elaborar estos productos se mantiene fiel a la de cuando se empleaban esas herramientas de antaño. Dada la singularidad de la campaña, se ha reforzado el aspecto sanitario. Su responsable, Dolores Ortega, ha indicado cómo todo el recinto está señalizado para garantizar la distancia de seguridad. Igualmente, se han habilitado geles dispensadores.

En cuanto a los productos, a la gama de temporadas pasadas de salchichones con piñones, este año se suma uno cocido con pitaya. Conocida como “fruta del dragón”, la pitaya procede de Centroamérica, aunque también se cultiva actualmente en nuestra tierra. Se trata, en palabras de Ortega, de una fruta llena de propiedades nutricionales, además de las antioxidantes y de ser rica en vitaminas y minerales diversos. La innovación de introducir estos productos se suma al carácter artesanal de los embutidos, todos de elaboración casera.

Deja un comentario