Mayo deja doce parados más en Rute

  • Tras el leve descenso de abril, el desempleo vuelve a sufrir un ligero repunte y la cifra total de personas en busca de trabajo se sitúa en 536

El balance interanual muestra cómo mayo de 2021 marcó un cambio de tendencia

Al contrario de la tónica del país, ya que en España por primera vez desde 2008 el paro baja de los tres millones, el desempleo ha vuelto a subir a nivel local. Según el informe mensual del Observatorio Argos, que sirve a la Junta de Andalucía los datos oficiales, mayo termina con 536 parados en Rute. Son doce más que en abril. Cierto es que, como ocurriera entonces, en que había bajado en cinco personas, no supone una gran diferencia. No obstante, sí implica un pequeño revés después del varapalo que dejaron las cifras de marzo, con las peores cifras tras el estado de alarma.

Por tanto, por tercer mes consecutivo, Rute se sitúa por encima de los quinientos desempleados. Durante los cuatro meses anteriores, de noviembre a febrero, las cifras se habían mantenido por debajo de ese umbral. Por sexos, de ese incremento en doce personas, hay siete parados varones más, mientras que otras cinco mujeres se han inscrito en mayo en la Oficina de Empleo. Para encontrar una lectura más optimista, hay que revisar el balance interanual. Ahora mismo hay 138 parados menos que en mayo de 2021.

Este repunte no es una novedad. Desde 2005, fecha en que Argos empezó a gestionar estos datos, el paro ha bajado en siete ocasiones en este mes y en el resto ha subido. Casi siempre han sido modificaciones leves. No hay que olvidar es un periodo fuera de las dos campañas que más empleo temporal generan, la de la aceituna y la de Navidad. No obstante, merece la pena detenerse en las dos últimas veces en que ha bajado respecto a abril, en 2020 y 2021. Ambas venían condicionadas por distintas etapas de la doble crisis sanitaria y económica. Hace dos años, mayo fue el mes de la llamada “desescalada” tras el estado de alarma. El año pasado, superados los estragos de la tercera ola, mayo marcó un cambio de tendencia que permitió encadenar siete meses consecutivos de descenso en el desempleo.

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