Un año más, el equipo de Los Monitores no dio opción a sus rivales
En una de las tardes más calurosas del verano, la del 27 de julio, se celebraba en la piscina municipal el XII Torneo Local de Waterpolo, organizado por el Club Natación Rute. Sin llegar a los mejores años de este torneo, la presente edición ha superado la participación de la anterior, con ocho equipos, dos más. La mitad compitieron en categoría infantil, hasta 14 años, y otros tantos en categoría de adultos. En esta última, el triunfo de nuevo fue para el equipo formado por Los Monitores. Una de sus jugadoras y entrenadora del club, María Rosa García, no cree que sepan nadar mejor que el resto. Sí advierte, en cambio, que el waterpolo requiere “mucha coordinación sobre el agua, fuerza y resistencia”. También, como en otros deportes conjuntos, influye el conocerse y mantener la misma base todos los años. Según García, “cada uno sabe el lugar que tiene que ocupar”.
Esa base se mantiene, en cualquier caso, en el resto de equipos que apenas si cambian un par de caras de una edición a otra. Con todo, Manuel Pérez, entrenador y coordinador del club, sí cree que esta modalidad de natación cada año va más en auge. Eso sí, ni él ni María Rosa pierden de vista que este torneo se afronta con una perspectiva lúdica. Además, Pérez recuerda que participa gente ajena al club “y son los que le dan la parte más alegre”.
Al margen de que se tome como la faceta más amable del club, el entrenador cree que es un deporte muy duro. Según ha explicado, su práctica requiere una piscina cubierta para entrenar en invierno y por eso casi se reduce a Cataluña y Madrid. En Rute, con las condiciones de la piscina municipal, que está “muy saturada” con los cursos y el club, cree que sería “inviable”. Sin ir más lejos, en Andalucía no es un deporte que se practique mucho.
Por otra parte, este torneo ha llegado como preámbulo para el Campeonato Comarcal de Natación, programado para el lunes, 3 de agosto. Por primera vez la final se va a disputar en Rute y de nuevo los nadadores locales llegan entre los mejor situados. Ello a pesar de que los jóvenes de municipios vecinos como Lucena o Cabra llevan todo el año entrenando. La gran mayoría lo abandona con la edad o con los estudios. Hasta entonces, en las últimas temporadas los ruteños han sido referentes provinciales “y si pudieran entrenar el resto del año alguno habría dado el salto al campeonato andaluz o el nacional”.
