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Las fiestas finales son el colofón a todo un año de trabajo y salen adelante gracias al esfuerzo de las asociaciones de padres y el profesorado
Galería Balance fin de curso colegios de Rute
Las fiestas de despedida suponen el colofón de un curso académico y el encuentro de toda la comunidad educativa. Así ha vuelto a ocurrir este año. De esta forma, si la semana anterior había sido la fiesta de fin de curso del colegio Ruperto Fernández Tellando, el pasado viernes 22 el turno fue para los colegios de Los Pinos y Fuente del Moral. Los primeros en empezar fueron los de Los Pinos, con una fiesta que arrancó a en torno a las ocho y media de la tarde. Se fueron sucediendo bailes y coreografías protagonizadas por los alumnos y alumnas de los diferentes niveles, con temas musicales de actualidad, rítmicos y pegadizos.
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Los alumnos de sexto de Primaria fueron los encargados de conducir el acto. Un día antes, ellos también tuvieron su particular y emotiva fiesta de graduación. El director del centro, José María Henares, fue el primero en subir al escenario para dirigirse a todos los allí presentes. Henares aprovechó para decir que se hace duro “tener que despedir a chicos y chicas que han pasado nueve años en el centro”. Comienzan su etapa en Secundaria, “otro escalón”, señaló, que hay que superar en la vida hasta alcanzar su madurez.
Además, resaltó la lucha continua de este centro por trabajar en valores y aspectos relacionados con el respecto, el medioambiente o la solidaridad. El director es consciente de la labor y la influencia que ejercen sobre sus alumnos. De hecho, dijo, “todos solemos recordar con mucho cariño a nuestros maestros”. Tras el proceso para determinar la Dirección de centro, José María Henares ha sido elegido para continuar en el puesto durante los próximos cuatro cursos, después de haberlo ostentado durante varios años en funciones.
En Fuente del Moral el programa se dividió en tres partes. A media tarde, hubo varios talleres coordinados por los padres y madres, Cruz Roja y el grupo de Educación Especial, junto a actividades de animación de GR-7 Aventura. Después, llegaron los bailes y coreografías, para rematar con la fiesta de la espuma. De la organización se encargó el AMPA La Fuente, aunque colaboró el claustro y todo el alumnado. El AMPA también gestionó la barra para recaudar fondos y costear actividades como ésta.
Por lo demás, tocó despedir a los escolares de sexto y hacer balance. Para el director José Antonio Tejero, el nivel general ha sido bueno. A quienes tienen alguna asignatura les recordó que en verano “hay tiempo para todo”. Respecto a la plantilla docente, hasta septiembre no se conocerá su composición definitiva, pero es seguro que a los escolares de sexto les sustituirá savia nueva. Esa mezcla del adiós a unos y la espera de otros hizo que fuera de nuevo un día emotivo. Como apuntó, son diez meses conviviendo con los menores “y se les coge cariño”. Aparte de sentar para siempre una relación con estos menores, sabe que son responsables de la base formativa de los futuros profesionales.
