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Esta muestra itinerante forma parte del proyecto “¿En qué puedo ayudarte?”, para concienciar y normalizar en torno a la alopecia provocada por los tratamientos contra el cáncer
El 19 de octubre de 2020, coincidiendo con el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, el centro de Córdoba apareció lleno de fotografías de gran formato de mujeres sin pelo. De esa forma tan rompedora se daba a conocer una insólita muestra titulada “Calvas y bellas”. Se pretendía así normalizar y dar visibilidad a las mujeres que sufren alopecia a raíz de los agresivos tratamientos contra el cáncer. Algunas de ellas mismas habían dado un paso al frente para participar como modelos. La muestra formaba parte de una iniciativa más ambiciosa, denominada “¿En qué te puedo ayudar?”, encaminada también a sensibilizar y socorrer a cualquier paciente de cáncer.
- En el proyecto colaboran dos pacientes ruteñas de cáncer y el fotógrafo José Cobos
Desde entonces el proyecto ha crecido y se ha ramificado. Al mismo tiempo, la exposición ha salido de la capital y recorre los municipios de la provincia, con el respaldo económico del Instituto Provincial de Bienestar Social (IPBS), dependiente de la Diputación. A finales de marzo llegaba a Rute para que se pueda ver hasta el 3 de abril en el Paseo Francisco Salto. En medio de ese plazo se presentaba con la presencia de sus dos impulsores: el coordinador del proyecto, Javier Cantero, y el oncólogo Juan De la Haba. La presentación tuvo que trasladarse al Edificio Alcalde Leoncio Rodríguez, por la amenaza de lluvia. Sin embargo, como apuntó la concejala de Servicios Sociales, Ana Lazo, no alteraba su finalidad de “normalizar” a estas personas.
Según De la Haba, el concepto de “belleza”, conlleva “pequeñas marcas”. Él lo descubrió en la consulta. De hecho, su compañero confirmó que “Calvas y bellas” nace “de la escucha” de unas pacientes a quienes les preocupaba la caída del cabello por la quimio. A raíz de ello, lanzaron una convocatoria en redes que obtuvo una respuesta “masiva” y se materializó en esa muestra fotográfica. Con la exposición “se dio la vuelta” a los estereotipos de belleza establecidos. Además, gracias al buen hacer de los fotógrafos que colaboraron, se captó la mirada de las pacientes; una mirada contrapuesta a la de la sociedad que les recordaba su enfermedad. Por eso mismo se quiso dar voz a sus testimonios, y así nació el documental paralelo.
La interacción final ha generado un espacio “de confianza” para que estas personas se fortalezcan al compartir sus experiencias. Entre quienes han participado en “Calvas y bellas” o proyectos paralelos como “A pelo” hay dos ruteñas: Matilde Moyano y Carmen Córdoba. También ha colaborado el fotógrafo local José Cobos. Ambas han sufrido cáncer de mama y lo cuentan sin tapujos ni tabúes. Y así lo dijeron en la presentación de Rute. Mati asegura que ha sido “una gran experiencia, dentro de lo duro que es combatir la enfermedad”. Pero vio con claridad que tenía la suerte de poder luchar, “porque hay gente que se queda en el camino”.
La positividad es un aspecto que las dos comparten. También coinciden en el papel de Javier Cantero y Juan De la Haba, en lo profesional y en lo humano. Carmen no dudó en destacar “la pasión” del oncólogo “por su trabajo y por las personas”. Los dos profesionales agradecieron el respaldo institucional que posibilita que “¿En qué te puedo ayudar?” crezca hacia proyectos relacionados con la medicina gráfica o el mindfulness. Ese esfuerzo común hizo que se reconociera a “Calvas y bellas” con el Premio Banderas de Andalucía a los valores humanos en 2021.
Para el presidente del IPBS, Francisco Ángel Sánchez, además de su labor de sensibilización, el proyecto encaja con la filosofía de la Diputación de estar presente en todos los municipios cordobeses. En este sentido, como alcalde de Rute y presidente de la institución provincial, Antonio Ruiz remarcó que se atiende a una situación muy concreta “en todos sus ámbitos”. Según Ruiz, los cánones de belleza están “sobrevalorados”, pero marcan, sobre todo a las mujeres. Frente a esa señal de desigualdad, quiso reivindicar la belleza interior y dio las gracias a estas mujeres “valientes” por compartirla.