Del 31 de marzo al 3 de abril, se ha celebrado en Barcelona la vigésima edición de la feria Alimentaria 2014. La Ciudad Condal ha acogido el salón de alimentación y bebidas con la mayor oferta de actividades gastronómicas de nuestro país. No en vano, los Príncipes de Asturias junto al ministro de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, Miguel Arias Cañete, estuvieron en la inauguración. Tres mil ochocientas empresas de todo el mundo muestran las principales novedades y tendencias del sector. Entre esas empresas, se han dado cita varias de nuestro pueblo. Ha sido el caso de Vidrierías Pérez Campos, Destilerías Duende, La Flor de Rute y Galleros Artesanos. También el grupo de empresas Arrebola y Perea se han desplazado hasta Barcelona. En muchos casos, llevan años acudiendo a esta cita obligada con la innovación y la internacionalización de este mercado.
Alimentaria permite mostrar los productos más innovadores, así como analizar el presente y el futuro del sector. Todo ello es posible en los catorce salones especializados con las últimas novedades en vinos, carne, aceites, restauración, bebidas, dulces o productos ecológicos. Por eso conviene estar presente. Algunos de los empresarios ruteños admiten que no esperaban a priori que la feria tuviera tantas visitas. Temían que la crisis pasara factura en la afluencia de público y se han encontrado con la grata sorpresa de que no ha sido así. Jorge Garrido, de Galleros Artesanos, asegura que en estos días los pasillos estaban “totalmente colapsados”. Juan de Dios Pérez, de Vidrierías Pérez Campos, es consciente de que la recuperación económica aún no ha llegado al ciudadano de a pie. Sin embargo, sí advierte que vuelve a haber movimiento a nivel de empresa.
Se calcula, en efecto, que han podido visitar la muestra unas cien mil personas de España y otras cuarenta mil de distintos países. De hecho, Juan José Garrido, de La Flor de Rute, resalta que muchas negociaciones se establecen directamente con clientes extranjeros. Para Juan José, lo interesante es que Alimentaria permite concretar esos contactos que la inercia de la campaña navideña impide cerrar. Estas dos empresas ruteñas encajan perfectamente en la filosofía de la feria. De ahí que su presencia en Barcelona sea habitual. Galleros lleva quince años asistiendo, con el gasto y el esfuerzo que supone. Jorge lo tiene muy claro: “hay que estar porque es invertir en futuro”. Según remarca, dentro del mundo de la alimentación, se tiene muy en cuenta todo lo referente a las distintas variedades de dulces. Como muestra de sus palabras, el pabellón número 4, con el elocuente nombre de “Mundidulce”, recoge los últimos lanzamientos en pastelería, confitería, turrones o galletas. Ha sido ahí donde, a través de la firma hermana, Productos Garrido, se han hecho cuatro contactos con empresas de exportación “interesadas en turrones y frutas escarchadas”.
Para Juan José Garrido, el hecho de que todo esté concentrado en el mismo espacio “permite hacer en cuatro días lo que no se puede hacer en un mes”. En ocasiones, son clientes con los que se concierta previamente algún contacto, “pero a los que no se puede visitar en la campaña de Navidad porque están bastante lejos”. Esos contactos, matiza, no son sólo con posibles compradores de los surtidos de La Flor. También se habla, por ejemplo, “con fabricantes de nuevos productos o vendedores de materias primas”. De igual modo, las tendencias de las que se toma nota no se ciñen al tipo de dulces que se elaboran. Juan José señala que hay que estar muy atento a lo que se pueda demandar desde Francia o Alemania. Aparte de sus preferencias y sus gustos, son “los países que están marcando el ritmo de esta crisis”. Por todo ello, La Flor de Rute siempre se ha dado cita en Alimentaria. Juan José recuerda que, como visitante, llegó a venir con su padre. Después, claro, ha estado él mismo como expositor. Tampoco lo duda, hay que ir cada año por estas fechas a Barcelona “porque ahí está todo”.
Junto a los dulces de navidad y los anisados, otro producto de referencia en nuestra tierra es el aceite de oliva. Ahí ha enfocado su actividad en Alimentaria Vidrierías Pérez Campos. Según Juan de Dios Pérez, la nueva regulación sobre envases desechables en la hostelería ha generado mucho movimiento en empresas como la suya.
Aparte de los aceites, destaca el crecimiento en otro tipo de envasados de vidrio, como los destinados a azafranes o lo que se conoce como “cerveza de autor”. La firma ruteña ha podido disponer de un stand propio, dentro del pabellón de “Olivaria”, pero a la vez muy cerca del de los vinos “Intervin”. Pérez asegura que en su ámbito también hay tendencias. Así, en el último lustro se ha seguido “la moda italiana”, con envases grandes y a la vez elegantes. Ahora se está pasando a otros más pequeños, “con una apariencia más cercana a un cosmético”. Para no perder el hilo de esas tendencias y porque supone “una referencia”, coincide con el resto de ruteños en que merece la pena el sobresfuerzo para estar en Alimentaria.
Dándose la mano en el tiempo con la feria Alimentaria 2014, ha habido otras dos citas en tierras catalanas donde se ha podido promocionar los productos ruteños. Así, el último día de Alimentaria coincidía con una presentación de Córdoba y la provincia en la Ciudad Condal. Esta acción promocional estaba organizada por la Diputación de Córdoba. Entre otros contenidos, la Mancomunidad distribuyó material turístico de los pueblos de la comarca, se ofrecieron degustaciones y se entablaron contactos con medios de comunicación y agencias de viajes. Un día después, arrancaba el Salón Internacional del Turismo de Cataluña. En este caso, Rute ha contado con un mostrador junto al Patronato Provincial de Turismo, y dentro a su vez de Turismo Andaluz. A través de este stand, durante cuatro días se ha atendido a los visitantes, ofreciendo material y degustaciones de anís de Rute.
