Arriba, Belén Ramos, junto al alcalde, en la comparencia pública en la que ha explicado por qué se marcha. Abajo, junto a ambos el concejal que la sustituirá en la Corporación
Hoy se ha hecho pública la renuncia de Belén Ramos, como concejala en el Ayuntamiento de Rute. Desde que comenzó la actual legislatura, hace ahora dos años, Belén Ramos asumió las concejalías de Igualdad, Cultura y Festejos. Además ha sido Teniente de Alcalde y una de las concejalas liberadas por actual equipo de Gobierno socialista. Será en el pleno del próximo jueves día 11 de julio cuando se lleve a cabo su renuncia de forma oficial. Sin embargo, durante esta mañana ha comparecido ante los medios de comunicación locales, junto con el alcalde de Rute, Antonio Ruiz, para explicar los motivos de su renuncia. Según ha manifestado se trata de “motivos estrictamente profesionales y personales”. La única razón por la que ha decidido abandonar su cargo público ha sido por entender que le resultaba “incompatible seguir compaginando su responsabilidad de servicio público con las exigencias académicas y profesionales”, en las que se encuentra inmersa.
Belén Ramos es licenciada en Filología Hispánica y en estos momentos realiza sus estudios de pos grado. En concreto, el doctorado que está haciendo basado en un escritor norteamericano, la obliga a ausentarse y a viajar al extranjero durante tres o cuatro meses. Para poder culminar su trabajo tendrá que residir en Nueva York durante ese tiempo. Belén Ramos ha insistido en que “este es el único y verdadero motivo por el que abandona la política local”. Además ha querido responder a determinados rumores en relación a que se marcha por desavenencias con algunos de sus compañeros del equipo de Gobierno. Ramos asegura que “dichos desencuentros son absolutamente falsos”. De hecho, afirma que “la relación con todos sus compañeros es magnífica”.
En especial, Belén Ramos ha querido “agradecer al alcalde el trato y el afecto recibido” durante todo este tiempo. También a los ruteños que durante todos estos días, y desde que se difundió la noticia, le han expresado su cariño y el reconocimiento a su trabajo. Para el alcalde “es una noticia triste”. Antonio Ruiz admite el aprecio personal que siente hacia Belén. Ha recordado como hace dos años la buscó para que formase parte de la agrupación socialista y concurriese con ellos a las elecciones municipales. Una vez celebrados dichos comicios, fue él quien también decidió que Belén Ramos asumiese tres delegaciones que implicaban mucha dedicación y presencia. El alcalde considera que “Belén Ramos ha mostrado de sobra su valía”. Y también que su decisión de elegirla fue acertada. El alcalde valora muy positivamente cómo Belén Ramos ha tenido que lidiar con una concejalía, como la de Festejos, con la mitad de presupuesto. Además, según Ruiz ha desempeñado “un trabajo inmejorable” en Cultura.
El concejal que entrará a formar parte de la Corporación tras la renuncia de Belén y siguiendo el orden de lista es Antonio Granados. A él le corresponderá, una vez asuma su cargo público, la concejalía de Festejos. Cultura pasará a manos de la concejala María Dolores Peláez y aún está por determinar quién asumirá la delegación de Igualdad. Tampoco se sabe todavía quien será el nuevo o la nueva concejala liberada. Para el alcalde, “la decisión de Belén ha sido un acto de honestidad”. Afirma que es “una mujer progresista que se ha entregado al 150% en su trabajo en el Ayuntamiento de Rute”. Ahora, es consciente de que no puede tener esa dedicación exclusiva. Y por eso, ha considerado que lo más conveniente es abandonar su cargo. Para el alcalde es “una faena” que se vaya. Sin embargo, entiende que no queda otra que agradecer públicamente su trabajo y aceptar su decisión. Una decisión, que según ha manifestado la propia Belén Ramos, es definitiva. Pues, entiende que su retos personales y profesionales pasan por la Universidad y no por la política. No obstante, valora muy positivamente su paso por la política local. Ante todo, para ella ha sido una experiencia nueva, intensa y gratificante, aunque admite que el cargo conlleva otras cuestiones con las que no ha estado tan a gusto.
