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Según la técnica de Dcoop, hay que actuar con cautela pero los agricultores deben estar atentos para comunicar cualquier sospecha
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La plaga se está manifestando de forma muy heterogénea y aún es pronto para cuantificar la superficie afectada
Los tratamientos autorizados para combatir la plaga del algodoncillo que afectó al olivar limítrofe con la aldea de Llanos de Don Juan parece que están resultando efectivos. Sin embargo, ahora la plaga se ha propagado a otras zonas del término municipal de Rute. Se han detectado otras áreas que en mayor o menor medida están afectadas por este insecto. La plaga ha evolucionado de forma heterogénea. Por tanto, según la técnica de Dcoop, María del Carmen Montes, no se puede generalizar y afirmar que en estos momentos en una determinada zona exista mayor concentración algodonosa. Por eso, considera que no se puede hacer una recomendación genérica de uso de un determinado tratamiento.
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Lo que se está haciendo por parte de los técnicos es llevar a cabo “muestreos puntuales”. Éstos asisten a las zonas y parcelas en las que el agricultor considera que existe más masa algodonosa de lo normal que puede terminar afectando al rendimiento de su producción. De esta forma, una vez se lleva a cabo la valoración y el estudio de campo de la situación, se procede a la recomendación que se estima más oportuna. En concreto, en el martes 17 de abril por la mañana María del Carmen Montes visitó varios parajes. En algunas fincas, ha concluido que la afectación es significativa y ha recomendado tratamiento inmediato. Por el contrario, en otras el algodoncillo que se ha presentado es similar al de temporadas anteriores. En este caso, lo aconsejable es esperar un poco antes de acometer ningún tratamiento, y vigilar la evolución en las próximas semanas.
Por todo ello, se insta a los agricultores a estar muy atentos. No obstante, no deben alarmarse y ser cautelosos. Según la técnica de Dcoop, si se llevan a cabo tratamientos generalizados puede repercutir negativamente en la fauna auxiliar. Además, insiste en el hecho de que sólo se pueden usar materias activas autorizadas para los tratamientos del olivar afectado. Según Montes, estos brotes se están propiciando por la meteorología, la falta de lluvias y la presentación de una primavera bastante seca.
El presidente de la Cooperativa Agrícola de Rute, Francisco Cabrera, asegura que los agricultores están muy preocupados por la plaga. Ante todo, a la menor sospecha de plaga, aconseja consultar a los técnicos que estimen pertinente o a los de la propia cooperativa sobre el nivel de afectación de las fincas, y sobre cuáles son las dosis y tratamientos autorizados que deben emplear. Respecto a la actual campaña agrícola, tras cuatro años de relativa sequía, Cabrera afirma que los rendimientos del olivar se han modificado. Ello ha provocado que no haya unos años de buenas cosechas y otros de malas.
La realidad es que las cosechas de las últimas campañas son similares, aunque desgraciadamente la de este año es algo más baja de lo esperado. Y es que, aunque el número de kilos de aceitunas que se han recogido es algo superior al de la temporada pasada, el rendimiento es menor. En concreto, en la actual campaña, que se dará por cerrada en torno al 23 de abril, se han recogido 18 millones de kilos de aceitunas. Sin embargo, Cabrera asegura que la falta de agua ha ocasionado que el fruto no madure adecuadamente y por tanto su rendimiento haya sido inferior. En cuanto al coste del aceite, es algo mejor que el año pasado. Pero cree que el alza de los precios no va a compensar la pérdida de rendimiento.
Por otra parte, el presidente ha aprovechado la ocasión para recordar a los agricultores que el plazo para la tramitación de las subvenciones de la PAC se ha ampliado hasta el 15 de mayo. Se ha optado por prolongarlo por una serie de dificultades técnicas que han impedido a las asociaciones y agrupaciones agrarias tramitar dichas ayudas en el tiempo y forma previsto. Por último, Cabrera se ha dirigido a los olivareros para recordarles que es fundamental e imprescindible que todos cuenten con su cuaderno de campo. Además, los que posean una explotación de más de cinco hectáreas deben tener un técnico contratado. Tanto la elaboración del contrato con el técnico como la confección y el manejo del cuaderno de campo son servicios que ofrece la cooperativa de forma gratuita a todos los socios. Se trata de requisitos imprescindibles que permiten crear la trazabilidad del producto y si no están correctamente establecidos pueden hacer que se pierdan subvenciones.