La Junta Local trae a Rute una jornada sobre hábitos alimenticios sanos y control de las emociones

  • Se ha llevado a cabo en el colegio de Los Pinos, donde cuentan con un programa afín denominado “Creciendo en Salud”

  • Desde la AECC de Córdoba, hay dos programas complementarios, “Comer bien es divertido” y “El bosque encantado”

La jornada se ha llevado a cabo con los cursos superiores de cada ciclo

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El colegio de Los Pinos ha acogido una jornada informativa para los escolares sobre hábitos alimenticios saludables y emociones. Se ha promovido de la mano de la Junta Local de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Cada año, lleva a cabo en los centros educativos de Rute y las aldeas la campaña de desayunos sanos. En esta ocasión propuso al colegio esta actividad que incluía una charla sobre control de las emociones. Para su director, José María Henares, es una experiencia “muy positiva”, que refuerza las jornadas de desayunos saludables y los valores que se inculcan a este respecto en el centro. No en vano, en Los Pinos cuentan con el programa “Creciendo en salud”, que aborda tanto la alimentación sana como el de la inteligencia emocional.

  • Según la psicóloga Laura Moro, no se trataría tanto de evitar las emociones como de saber gestionarlas, identificarlas y manejarlas

Por su parte, Juan de Dios Pérez, como miembro de la Junta Local, ha remarcado que hay aspectos como éste del control de las emociones en el que, “como voluntarios”, no pueden aportar. De ahí que se haya contado con Laura Moro, psicóloga de la AECC de Córdoba. Según ha explicado, a través de la asociación hay dos programas en esta línea. Uno se denomina “Comer bien es divertido” y está destinado “al curso superior de cada ciclo”, es decir, Infantil de 5 años, 2º y 4º de Primaria. El otro programa preventivo lleva por nombre “El bosque encantado”. Trata sobre las emociones y está enfocado a 3º de Primaria. Según la psicóloga, los escolares “conocen la teoría”, pero lo idóneo es empezar a concienciar “cuanto antes”. Moro asegura que a estas edades “son buenos receptores”. Otro tema será cómo se ponga en práctica en casa lo aprendido.

Respecto a las emociones, está comprobado que una mala canalización puede conducir a situaciones adversaras. Como ejemplo, ha mencionado el caso de quien se fuma un cigarrillo para calmar la ira. La psicóloga matiza que no se trataría tanto de evitar las emociones como de “saber gestionarlas, mantenerlas en unos rangos de normalidad”. Así, mediante diversos ejercicios se enseña a los pequeños a identificarlas y manejarlas. Según ha dicho, esto saben hacerlo con relativa facilidad. La dificultad viene en controlarlas, “muchas veces por los modelos que ven en casa”.

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