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Las 250 entradas puestas a la venta se ampliaron a 300 hasta llenar la Ludoteca para recaudar fondos para la restauración de la Virgen de la Cabeza
La llamada de la Virgen de la Cabeza y Sebastián Leal ha tenido la mejor respuesta posible. El bailaor se había ofrecido para celebrar una gala a beneficio de la real cofradía, para recaudar fondos para la restauración de la Morenita. Leal puso a disposición de la cofradía al alumnado de su Escuela de Baile y que actuara en un espacio cerrado como el Centro Cultural Rafael Martínez-Simancas, para poder vender entradas. Al final, el aforo de la Ludoteca se quedó pequeño.
Según detalló la secretaria de la cofradía, Teresa Cobos, se había hecho una remesa inicial de 250 entradas. La cifra se amplió a 300, que también se agotaron. A ello se suman quienes colaboraron a través de la fila cero. En total, calcula que se han vendido en torno a cuatrocientas entradas. Asimismo, hay que tener en cuenta al público que, sin entrada, consumió en la barra que se había montado en la misma Ludoteca.
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Varios factores se conjuntaron para esta capacidad de convocatoria. Por un lado, la misma devoción por la Morenita facilita que cualquier evento que organice la cofradía garantice el éxito. Además, la gala constó de más de veinte coreografías en las que participó buena parte del alumnado y profesionales de otras escuelas, con el público adicional que “arrastran”. Como guinda, dentro del frío de estas fechas, acompañó un día soleado que invitaba a salir a la calle y degustar las migas, los bocadillos y otros platos que se ofrecieron en la barra.
Teresa Cobos agradeció la implicación de Sebastián Leal y la colaboración del público. En cuanto al proceso de restauración de la Virgen de la Cabeza, avanzó que marcha a buen ritmo y dentro de tiempo. Desde el 18 de noviembre la Morenita está en Sevilla, en la sede del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH). La primera reunión cara a cara no tendrá lugar hasta enero, pero ya está constituida la comisión de seguimiento. La conforman siete personas, entre las dos partes implicadas.
La de Rute la integran Andrés Cobos, como presidente de la cofradía, Francisco Porras, como prioste y vestidor de la Virgen, Miguel Ángel Borrego, como licenciado en Bellas Artes y restaurador, y dos restauradores compañeros suyos que trabajan “mano a mano con él”. La secretaria matiza que en estos aspectos es importante que haya “gente entendida” que puedan seguir el proceso con pleno conocimiento.
