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El artista ruteño ha presentado en las instalaciones de la Chapiteau de l’Espace Fontvieille del Principado cinco cuadros, entre los que había algunos inéditos
El pintor ruteño Kisco Aroca sigue promocionando su obra en el plano internacional. En esta ocasión, el artista local ha acudido hasta Mónaco. Allí ha participado en una muestra de fotografías, esculturas, pinturas e instalaciones artísticas, que han llenado la Chapiteau de l’Espace Fontvieille. Se trata de uno de los lugares de recepción más grandes con los que cuenta el Principado de Mónaco. Más de 150 stands, galerías de todos los rincones del planeta, artistas internacionales consagrados y emergentes han mostrado sus trabajos. Cinco de estos cuadros llevaban la autoría de Aroca.
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Se han podido ver en una cita que se confirma como un referente y una plataforma líder para que las más afamadas galerías y los más emergentes artistas internacionales muestren sus últimas creaciones en la Costa Azul. Pese a contar con una superficie de apenas dos kilómetros cuadrados, Mónaco es un sitio privilegiado, junto al mar Mediterráneo y las montañas de La Turbie. Goza de buen clima, aparte de atractivos mundialmente conocidos como el Casino de Montecarlo o el Gran Premio de Fórmula 1. Además, se ubica en un lugar estratégico, cerca de ciudades francesas relevantes como Niza o de la misma frontera italiana.
En ese contexto se ha celebrado esta prestigiosa muestra internacional de arte contemporáneo que da cabida a galerías y artistas de todo el planeta, tanto consagrados como emergentes. Las obras del pintor ruteño se pudieron ver de nuevo en el stand de Excellence Art Gallery, la galería de Marbella con la que actualmente trabaja bajo la dirección de Giuseppe Carnevale. Junto a otros compañeros nacionales e internacionales, las paredes del stand I04 han sorprendido al público asistente. En su caso, han llamado la atención los colores vibrantes y alegres de sus obras, las texturas que dan volumen y su técnica mixta particular.
De esta forma, Aroca sigue participando en exposiciones de renombre. Asimismo, el hecho de acudir personalmente le da la oportunidad de contar a los visitantes las historias que hay tras los trazos y pinceladas de sus creaciones. Parte de estos cuadros ya habían estado en muestras anteriores en Bruselas, Barcelona o Marbella. Sin embargo, en Mónaco también se han podido ver otras creaciones inéditas en las que el artista ha trabajado en los últimos meses. Su proyección aumenta exponencialmente mediante estas citas y los contactos que establece para futuros proyectos.
Al mismo tiempo, Kisco Aroca no pierde de vista su posición local. Sigue dando a conocer la riqueza de su tierra y de su gente, sus atractivos turísticos y en general todo lo que hace que siga anclado a sus raíces. Además de estas citas internacionales quiere seguir dándose a conocer en su entorno más cercano. Sus próximos proyectos se centrarán en la vecina localidad de Iznájar, donde prepara ya su próxima exposición individual en el castillo. También va a participar a finales de septiembre en un acto benéfico en la aldea de la Fuente del Conde, con una asociación de habla inglesa. Para 2025 entre otras proyecciones planea celebrar la segunda muestra individual en Rute, tras la retrospectiva de abril del año pasado. Según confiesa, exponer en su pueblo le entusiasma y le emociona, y hasta lo considera más importante que otras citas internacionales.
