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Sólo una decisión de los jueces, que entendieron que su último ataque había sido fuera de tiempo, privó al ruteño de subir a lo más alto del podio
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La cita se ha celebrado en la localidad sevillana de Bormujos para las categorías catete y absoluta
El Club Deportivo Gimtar sigue cosechando éxitos para el deporte en Rute. De manera reciente, muchos de esos logros llevan el nombre de José Antonio Puerto. Pese a su juventud (está en su último año de cadete), desde primera hora el chico sorprendió a propios (entrenadores) y extraños (rivales). Que sus contrincantes hayan encontrado en él un hueso duro entra dentro de la lógica de quien se prepara bien y tiene aptitudes. Pero además los dos principales preparadores del club, Antonio José González y Juan Gabriel Romero, siempre han ensalzado su espíritu deportivo, su entrega y su lucha por mejorar. González remarca que con frecuencia se queda un rato después de las clases mejorando la técnica y la puesta a punto física. De ahí que concluya que su espíritu de sacrificio “hoy por hoy no lo tiene nadie en el club”. Valgan esas condiciones físicas y de actitud mental para entender el meritorio segundo puesto alcanzado en el Campeonato de Andalucía de Taekwondo. Se disputó el pasado sábado 21 de enero en la localidad sevillana de Bormujos en las categorías cadete y absoluta. Puerto fue el único representante del club, pero su buena actuación le ha valido volver a Rute con una medalla de plata colgada de su cuello.
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Como muestra de su inconformismo y de su deseo de llegar siempre a lo máximo, confiesa que se siente “contento” con su papel, aunque “un poco rabioso”. Y es que, pese al mérito incuestionable de un subcampeonato, tuvo a tiro quedar primero. Antonio José González comparte sensaciones. Según explica el entrenador, a falta de tan sólo 18 segundos para que concluyera el combate final, su pupilo aventajaba en un punto a su competidor, cuando éste alcanzó de una patada el casco del ruteño. Ello le permitió ponerse dos puntos por delante. Puerto no se amilanó y devolvió el golpe, lo que le hubiera servido para recuperar la ventaja y hacerse con el título. Sin embargo, los jueces consideraron que la acción se había producido fuera de tiempo. Viendo las imágenes (el club siempre graba sus combates), Antonio José y Juan Gabriel están convencidos de que fue en el último segundo, y por tanto válida. Pero su reclamación ante los árbitros no surtió efecto.
No es la única razón para haber vuelto de Bormujos con ese sabor agridulce. Aunque está cuajando una temporada impecable, Puerto acudía a esta cita después de llevar semanas arrastrando una lesión. Ello le ha privado de rendir al cien por cien y hasta de haber preparado los entrenamientos previos con la intensidad deseada. Su entrenador remarca que, aun con todos esos condicionantes, “aguantó el dolor”. De hecho, cree que hizo “los tres mejores combates” que él le ha visto. El joven puntualiza que en los dos primeros, “que fueron muy intensos”, se sintió “muy bien”. Como apenas si hay pausa entre uno y otro, fue en la final cuando notó que el cansancio y la lesión empezaban a pasar factura. Aun así, arriesgó en lugar de mostrarse conservador y dejar pasar el tiempo en busca de un empate. En este caso, esa valentía no dio los frutos deseados, aunque fuera por un segundo. Pero al menos le deja las puertas abiertas para, si doblan peso, ser convocado por la Selección Andaluza para el próximo Campeonato de España.
